En el banco de Botín aseguran que no es una operación a favor de Florentino Pérez, pero el constructor está feliz con ella
Un 5% tanto de la absorbida como de la absorbente; es decir, 5% de la resultante. Ese es el objetivo de Emilio Botín, y, atención, la idea no es hacerlo vía gestoras –con el dinero de los demás- sino con fondos propios.
Para tranquilizar a Ignacio S. Galán, presidente de Iberdrola, en el Santander insisten en que se trata de una inversión financiera. Naturalmente, todas las inversiones del Santander son financieras, al menos en la industria: compran para vender con plusvalía. Ahora bien, en ese viaje puede apoyar a unos y a otros, especialmente a quienes le ofrezcan un mayor rendimiento.
Dicho de otra forma, aunque en el Santander lo nieguen, lo cierro es que Florentino Pérez es el beneficiario de la entrada de Botín. Ahora incluso a lo mejor puede permitirse el lujo de intentar, una vez más, la fusión entre Iberdrola y Fenosa –que controla con un 40%- aunque lo cierto es que Florentino estaría dispuesto a vender el paquete de control de Fenosa a Gas Natural y continuar comprando Iberdrolas.
En definitiva, el Santander jugará en Iberdrola el mismo papel que en su día jugó en Endesa o en Fenosa: el especulador en búsqueda del mejor precio. E incluso, podría intentar colocarle a Iberdrola su paquete en la petrolera CEPSA, controlada por Total.
