El discurso oficial no se ha movido un milímetro : para evitar el aborto provocado es necesaria mayor información sexual. De ahí el póntelo, pónselo y las actuales campañas de promoción del preservativo. Por cierto, todo un señor negocio de la industria del látex realizado al abrigo de la presión política. Con razón, faltaba la P de Política a las cuatro P del marketing descritas por Kotler: precio, producto, distribución (place) y comunicación (promotion). En el caso del preservativo, la P de política resulta clave.
El precio es insignificante, aunque la presión del lobby anticonceptivo insiste en que este sea subvencionado. La distribución se hace a través de farmacias, aunque el mismo lobby insiste en la presencia en las escuelas. ¿A qué van nuestros chavales al colegio? La comunicación es innecesaria, todo el mundo sabe qué es un preservativo y para qué sirve. Faltaba la P, y el gobierno está dispuesto a apostar en esta línea, siguiendo los dictados del lobby anticonceptivo y a mayor gloria de las cuentas de resultados de los fabricantes
Esto es lo que parece deducirse de las declaraciones de la secretaria de Igualdad del PSOE, Maribel Montaño, presente en la Conferencia Internacional sobre Salud Sexual y Reproductiva celebrada este lunes en Lisboa. Montaño defiende la prevención a través de anticonceptivos y la información dirigida fundamentalmente a mujeres jóvenes e inmigrantes. Según su análisis, a Comunidad de Madrid es el contraejemplo : la menor educación sexual provoca un incremento en la cifra de embarazos no deseados y por tanto de abortos provocados.
Sin embargo, Montaño sabe que miente. Para empezar porque lo que mayoritariamente se autocalifica como educación sexual no es sino instrucción sexual, que no es exactamente lo mismo. Pero es que además, la experiencia demuestra que a mayor información anticonceptiva, mayor sensación de no riesgo y mayor cifra de embarazos no deseados. Es el caso de Estados Unidos, pero también de España. No faltan campañas para promover el preservativo. Ni tampoco subvencionar el producto. Lo que falta es verdadera educación sexual en la fidelidad y la abstinencia hasta que no se encuentre una pareja estable con vocación de eternidad.
Por si fuera poco, Montaño advierte que aunque la prioridad del PSOE no es avanzar hacia una ley de plazos, tampoco se descarta. En realidad sabe muy bien que eso no sería necesario, porque ella misma ha defendido en Portugal el modelo español para conseguir por la vía de los hechos el aborto libre y gratuito. Primera estación: liberalizar el establecimiento de centros privados con inspección nula por parte de las administraciones sanitarias. Estos centros practicarán el aborto libre mediante el abuso del supuesto de salud física y psíquica de la madre, el 97% de las razones esgrimidas para abortar en España. Segunda estación: convenios entre la administración sanitaria y los centros privados para financiar el aborto derivado desde los centros públicos. De esta manera se consigue el aborto gratuito.
Todo lo demás son debates estériles para distraer la atención. El fraude de ley existe y en este caso, el Defensor del Pueblo ya ha advertido que no intervendrá porque se manifiesta defensor de los derechos de las mujeres. Un eufemismo para esconder una posición poco plural y muy poco respetuosa con la actual legislación despenalizadora. Pobre Múgica, tan fino con el Estatut y tan flexible con la defensa de los derechos de los no nacidos.
Luis Losada Pescador