El órgano de gobierno de los jueces no entra en el fondo de la sentencia

En el mes de junio un juez de Familia de Murcia, Fernando Ferrín Calamita, escandalizaba a los políticamente correctos. Se le ocurrió retirar la custodia de sus hijas a una mujer argumentando que el hecho de que es lesbiana "influye negativamente" en la educación de éstas.

Ahora, el Consejo General del Poder Judicial ha decidido por unanimidad abrir expediente disciplinario al juez Ferrín Calamita. En su auto, Ferrín se basaba en el criterio de los especialistas y en el sentido común para retirar la custodia a la madre. Sin embargo, no es éste el motivo del expediente, sino el retraso injustificado en la tramitación judicial del caso.

Y es que entrar en el fondo de la decisión del juez, supondría romper el principio constitucional de independencia de los magistrados. De ahí la catarata de expedientes y denuncias que le ha caído a Ferrín por cuestiones relacionadas con el auto, pero no con los argumentos de peso. En definitiva, un aviso a navegantes para tapar la boca a los funcionarios mientras se piensa cómo articular el invento de la homofobia como delito.