El presidente de la Comisión Europea considera que Turquía debe esperar
Al menos eso es lo que se deduce de sus palabras, pronunciadas en una entrevista con Televisión Española (ver resumen de radio y TV de Hispanidad): la canciller Merkel, presidenta de turno de la Unión, estaría elaborando un nuevo Tratado Constitucional, porque el de Giscard d'Estaing, fue vetado por franceses y holandeses en referéndum.
Es cierto que durante la última Cumbre Europea, la Merkel insistió en la necesidad de retomar le proceso. Pero la canciller jugaba con la palabra, ya luda a la necesidad de aprobar el mismo texto Giscard: lo que ahora plantea, o eso da a entender, Durao Barroso es otra cosa. Dice que los alemanes están preparando un nuevo texto.
La idea, apenas reconocida, y mucho menos por Durao, consiste en promulgar un texto más tragable pero que no someta referéndum, sino que sea aprobado por los parlamentos, como representantes de la soberanía popular. Es decir, como se hizo en Alemania. Ahora bien, una Constitución es la pieza clave del ordenamiento jurídico, la que reconoce los derechos y libertades de los europeos. ¿Puede aprobarse por mayoría parlamentaria una norma de tanta trascendencia?
