El pan ha subido un 85%, los huevos (114%), la leche (48%), el arroz (45%), el aceite (33%) o las patatas (116%)
Pues bien: ayer la OCU confirmó lo adelantado por Hispanidad: en diez años, en España se han homologado los precios con los países de nuestro entorno, pero no los salarios.
Vamos con los datos: según el INE, en 2002, el salario medio de los españoles era de 19.802 euros brutos al año (1.650 al mes) y en 2009 (última encuesta publicada) se situaba en 22.511 euros (1.875 al mes). No obstante, según la estadística del INE el sueldo "más frecuente" en 2009 estuvo en torno a los 15.500 euros al año (1.290 al mes). Por contra, el crecimiento acumulado del IPC es de casi el 32% en los dos últimos lustros. Según las proyecciones de la OCU, si el salario medio hubiese crecido de acuerdo a los precios, en 2009 hubiera sido 3.600 euros brutos anuales mayor.
Ahora, datos de la subida de los precios en los últimos diez años: el pan ha subido un 85%, los huevos, un 114%, la leche (48%), el arroz (45%), el aceite (33%) o las patatas (116%). En los transportes, el tren es un 45% más caro que en 2002; el autobús cuesta de media un 48% más; el transporte urbano ha subido un 58%, mientras que los carburantes cuestan hoy un 82% más que antes del euro.
Además, la vivienda es hoy un 66% más cara que cuando entró en vigor el euro.
Lo único que ha bajado son los productos tecnológicos: televisores, cadenas de música y lectores DVD cuestan un 62% menos de lo que costaban en tiempos de la peseta; las videocámaras y grabadoras son un 6% más baratos que en 2001; las cámaras de fotos cuestan un 72% menos, y el precio medio de los electrodomésticos ha bajado un 4% en los últimos 10 años.
¿Quién se ha forrado con todo esto a costa de los ciudadanos?
Andrés Velázquez
andres@hispanidad.com
En Hispanidad ya lo advertimos recientemente. El euro ha supuesto un timo para los españoles. Entró en vigor el 1 de enero de 2002 y, por arte de magia -en virtud del tamaño similar de la moneda de cien pesetas y la del euro- muchos artículos que valían 100 pesetas pasaron a costar 166 de la noche a la mañana. Es decir, un encarecimiento del 66%. Y al tiempo que se disparaban los precios, los salarios permanecían prácticamente igual.
Pues bien: ayer la OCU confirmó lo adelantado por Hispanidad: en diez años, en España se han homologado los precios con los países de nuestro entorno, pero no los salarios.
Vamos con los datos: según el INE, en 2002, el salario medio de los españoles era de 19.802 euros brutos al año (1.650 al mes) y en 2009 (última encuesta publicada) se situaba en 22.511 euros (1.875 al mes). No obstante, según la estadística del INE el sueldo "más frecuente" en 2009 estuvo en torno a los 15.500 euros al año (1.290 al mes). Por contra, el crecimiento acumulado del IPC es de casi el 32% en los dos últimos lustros. Según las proyecciones de la OCU, si el salario medio hubiese crecido de acuerdo a los precios, en 2009 hubiera sido 3.600 euros brutos anuales mayor.
Ahora, datos de la subida de los precios en los últimos diez años: el pan ha subido un 85%, los huevos, un 114%, la leche (48%), el arroz (45%), el aceite (33%) o las patatas (116%). En los transportes, el tren es un 45% más caro que en 2002; el autobús cuesta de media un 48% más; el transporte urbano ha subido un 58%, mientras que los carburantes cuestan hoy un 82% más que antes del euro.
Además, la vivienda es hoy un 66% más cara que cuando entró en vigor el euro.
Lo único que ha bajado son los productos tecnológicos: televisores, cadenas de música y lectores DVD cuestan un 62% menos de lo que costaban en tiempos de la peseta; las videocámaras y grabadoras son un 6% más baratos que en 2001; las cámaras de fotos cuestan un 72% menos, y el precio medio de los electrodomésticos ha bajado un 4% en los últimos 10 años.
¿Quién se ha forrado con todo esto a costa de los ciudadanos?
Andrés Velázquez
andres@hispanidad.com