El grupo Vodafone registró un beneficio neto de 2.818 millones de libras (4.205 millones de euros) en los primeros seis meses de su ejercicio fiscal 2005/2006, que se cerraron el pasado 30 de septiembre, lo que supone una caída del 23,5% en comparación con el mismo periodo del ejercicio precedente.
Con un crecimiento del 9% en los ingresos, Vodafone obtuvo un resultado bruto de explotación de 10.016 millones de euros, un 6,2% más, y la deuda neta a 30 de septiembre se elevaba un 27,2% hasta alcanzar los 14.093 millones de libras (21.034 millones de euros), en especial debido a las nuevas adquisiciones, pues su consejero-delegado, Arun Sarin, está empeñado en copar el mundo entero.
Como se sabe, el ejercicio fiscal de la primera empresa de telefonía del mundo por capitalización (sólo telefonía móvil) va de 1 de abril la 31 de marzo. El equipo directivo de Vodafone ha advertido que la rentabilidad por usuario puede caer. El mercado no ha acogido de buen grado los resultados de Vodafone, cuya cotización bajó tras conocerse los resultados. De cualquier forma, la firma angloamericana se ha situado como líder en la adopción de tecnología de telefonía móvil de tercera generación
