Sr. Director:
La última cumbre del G-20, celebrada el último trimestre del pasado año, resultó decepcionante. Los países más poderosos fueron incapaces de alcanzar compromisos en los asuntos principales en tiempos de enorme zozobra económica.

 

Nada sobre cómo robustecer los mecanismos de ayuda del FMI; tampoco sobre la participación de este organismo y de las potencias en el fondo de rescate de países en apuros y menos en la reforma del sistema monetario internacional. Voluntad de vigilar a Italia y a los grandes bancos. Pienso que el mundo necesitaba otro mensaje.

José Morales Martín