Estoy dispuesto a aceptarlo desde antes de empezar: esta no es la cuestión nuclear del proceso de paz en el País Vasco. Por cierto, Radio Naconal de España, también conocida como La Voz de la Moncloa, ha asumido la terminología batasuna con indecible entusiasmo : ya no habla, al menos no sólo, de Proceso de Paz, sino de Proceso de Paz y Normalización del País Vasco, una terminología propia de los proetarras, aunque no es verdad que éstos ya hayan superado esa etapa.
Pero a lo nuestro. El líder batasuno Arnaldo Otegi gusta rodearse de mujeres, porque un revolucionario, aunque sea euskaldún, debe creer en la igualdad de los sexos. Es más, con la excepción de su compañero Joseba Permach, en la escenografía abertzale los rostros cambian continuamente, y se trata de rostros mayoritariamente femeninos. En el entorno abertzale las mujeres no hablan, es cierto, pero la cámara les enfoca. Y con todo respeto : he visto mujeres poco atractivas en mi vida, pero éstas se llevan la palma. Dicen que toda mujer ha sido guapa alguna vez en su vida, o al menos ha tenido cierto encanto. Pues me temo que tan honrada evidencia falla estrepitosamente en los aledaños de HB. Son verdaderos antídotos de la concupiscencia. Se decía de los ingleses que conquistaron el mundo huyendo de la colonia británica y hartos del odioso parecido entre la expresión de sus féminas y el rostro de sus caballos. Pues bien, no comprendo como queda un solo batasuno en Euskadi.
Claro que, a continuación hay que preguntarse por el otro sector. En belleza femenina, es sabido, soy un verdadero especialista, pero de varones entiendo poco. Ahora bien, a simple visa, uno diría que la única explicación para que estos no abandonen los nobles valles euskaros es que sus posibilidades en el exterior están claramente limitadas. Es más, creo que he llegado al final del túnel: no les queda otro remedio que hacer tierra con la tierra vasca, y entienda cada cual lo que le pete.
Es el incierto futuro de la izquierda abertzale: ¿cómo se reproducen? ¿Quizás ha sido Arnaldo el inventor de la concepción sin sexo? Desde Tolkien aquí sabemos que la maldad hace que los elfos se conviertan en orcos, pero sólo en Euskadi estamos comprobado cómo la autodeterminación está convirtiendo a las elfas vascongadas en orcas. Y a los otegis en trasgos. Lo de Sabino Arana no es un problema político, sin ontológico, racial. En eso no iba desencaminado.
Eulogio López