En estos días el Sindicat Catòlic de Treballadors de Catalunya ha puesto en marcha una iniciativa de recogida de firmas para respaldar una solicitud dirigida a la Consellera d'Ensenyament de la Generalitat de Catalunya Irene Rigau, para la recuperación de la enseñanza de religión en el segundo ciclo de educación infantil (3, 4 y 5 años).Recordamos que el pasado 21 de junio de 2013, la Secretaría General del Departament d'Ensenyament de la Generalitat de Catalunya eliminó la referencia a la enseñanza de la religión en el segundo ciclo de Educación Infantil de los Documentos para la organización y la gestión de los centros para el curso 2013-2014, aún a pesar de reconocer en el propio texto que "de acuerdo con la normativa vigente, la enseñanza de la religión tiene carácter optativo para los alumnos y es de oferta 'obligatoria' para todos los centros".
En apoyo a la iniciativa para la recuperación de la asignatura de religión, desde e-Cristians se quiere poner de manifiesto que:
1º.- La decisión adoptada el pasado junio de 2013 por las autoridades educativas de la Generalitat de Catalunya son contrarias al ordenamiento jurídico vigente y en especial a la Disposición Adicional II de la Ley Orgánica 2/2006, de 3 de mayo, de Educación, desarrollada a su vez por el Real Decreto 1630/2006, de 29 de diciembre, que establece claramente que, entre las enseñanzas mínimas del segundo ciclo de Educación Infantil, debe incluirse las enseñanzas de religión.
2º.- La medida adoptada por las autoridades educativas de la Generalitat supone una discriminación por razón de credo religioso a los alumnos católicos que cursan estudios en los colegios públicos, lo que atenta no sólo contra la Constitución española sino también contra los Derechos Humanos. Y es discriminatoria en la medida en que los padres de los alumnos con creencias religiosas tendrán que aceptar que sus hijos se eduquen, en un momento de especial importancia como es la infancia, sin los valores propios de sus creencias religiosas; algo que no ocurre cuando los padres son agnósticos o ateos.
3º.- Las autoridades educativas actúan como si desconocieran que los conocimientos en materia de religión son esenciales para la comprensión de otras materias, como la literatura, la filosofía, la historia o el arte. Negar una base sólida de conocimiento sobre religión –que sólo se consigue si desde la Educación Infantil se aborda dicha asignatura- conllevará una merma en la calidad educativa de niveles superiores, contribuyendo de ese modo a la emergencia educativa tantas veces denunciada como uno de los grandes males de nuestra sociedad. En este sentido recordemos que el propio Consejo Asesor para la Diversidad Religiosa presentó, el pasado mes de octubre de 2013, un informe donde se formulaba la necesidad de que la escuela deba "combatir el analfabetismo simbólico y religioso que imposibilita la comprensión de las obras culturales […] y a trabajar activamente para deshacer prejuicios negativos y romper con los tópicos" y se solicitaba a la Generalitat que actuara contra la progresiva desaparición de la cultura religiosa en la escuela.
4º- Eliminar la asignatura de religión de la Educación Infantil marca la senda de la progresiva liquidación de la educación religiosa en la escuela pública. La falta de oferta en los cursos de P3, P4 y P5 está condenada a que en breve plazo desaparezca progresivamente de los cursos superiores, hasta su completa eliminación.
5ª.- El Departament d'Ensenyament de la Generalitat, finalmente, profundiza con esta omisión, en la rotura de los vínculos que mantienen unida a la sociedad. La religión es, el tronco común de nuestra civilización y el depositario de los valores éticos y morales que dotan de fundamento las decisiones del mañana. La religión aporta un marco de referencia estable sobre los valores y virtudes que han de regir a la sociedad y las relaciones entre sus miembros. La falta de este importante referente solo comporta el aislamiento, el individualismo y el empeoramiento del rendimiento escolar.
Carecer del fundamento moral que otorga la religión condenará a las generaciones futuras a depender del individualismo, de la satisfacción inmediata de los deseos y, por tanto, a desestructurar aún más si cabe la sociedad en la que viviremos.
Por las razones expuestas, pedimos una acción urgente para que se reintroduzca nuevamente la asignatura de religión en la próxima programación del Curso 2014-2015, al tiempo que se revise por parte de la Inspección las condiciones en que se ofrece dicha materia en el resto del ciclo educativo, toda vez que existen numerosos casos donde tal oferta no se realiza, se disuaden a los padres que la solicitan, o se la sitúa en horarios que la discriminan respecto del conocimiento de otras materias regladas.
e-Cristians