Comienza una campaña de desprestigio contra el movimiento pro-objeción

Sube el tono de la intolerancia gubernamental contra el movimiento de objeción a Educación para la Ciudadanía. Este jueves informábamos de los insultos recibidos por el presidente del Foro Español de la Familia de parte del responsable del ministerio de Educación en Ciudad Real. Un signo de que el Gobierno está inquieto y puede emprender una campaña de desprestigio del movimiento pro-objeción.

Pues bien, en la tarde de este miércoles, la ministra de Educación, Mercedes Cabrera, amenazaba a los objetores con que no pasarían de curso. Unas palabras que han sido interpretadas por la plataforma HazteOir como susceptibles de delito de amenazas. Así que ya han anunciado que podrían presentar una querella criminal contra la ministra del ramo.

No hay duda de que el asunto preocupa y mucho al gobierno. Pensaban que se iban a encontrar con una sociedad adormecida, como es habitual. Pero ocurre que la sociedad civil está movilizada. Ha sido y sigue siendo el gran freno a los abusos del Ejecutivo Zapatero.