Puente Moreno denuncia que la campaña que se hizo entonces fue completamente engañosa y manipulada, tal y como se venía haciendo en otros países. Una vez conseguido ese objetivo, nos llegó el silencio, otra ley tácita donde nadie habla de lo que supone el aborto en nuestra sociedad española.
La portavoz de AVA continúa: Yo aborté hace más de 10 años y me lo plantearon de manera fácil, indolora, rápida. Pero lo que no me contaron fue la verdad: lo que me tocó vivir después fue un infierno inimaginable de dolor y sufrimiento.
Por todo esto, Esperanza Puente lanza un grito al que se unen las mujeres que han acudido a AVA en busca de ayuda médica y psiquiátrica: ¡Ya basta!, no hay derecho a que la mujer que tantos logros ha conseguido siga siendo manipulada en un tema tan importante como la transmisión de la vida. Las mujeres que abortamos sabemos perfectamente que es muestro hijo.
La portavoz de AVA continúa: Yo no fui libre para abortar: no me dieron ninguna información, no me dieron ninguna alternativa y luego me quedé sola. Tuve que buscar ayuda psiquiátrica privada porque la Seguridad Social me la negó. Hoy, Esperanza ya ha superado y puede dar la cara para contar la verdad: el aborto no es salud, por eso tampoco puede ser un derecho de la mujer.
Esperanza Puente concluye: El reguero de muerte y de dolor que estamos sufriendo las personas y sobre todo las madres que hemos intervenido en un aborto provocado, debe acabar. Hay que romper esa ley de silencio para dar paso a la Esperanza, porque si hablamos claro y con la verdad, nuestro futuro tendrá la oportunidad de ser un futuro en libertad, un futuro de progreso, un futuro del amor que nos hace seres humanos.
Asociación de Víctimas del Aborto
www.ava.org