Seguimos en la huida hacia delante camino a ningún sitio. Artur Mas se declara independentista. Pero a largo plazo. Sabe que ningún estado de la UE reconocería el supuesto estado catalán. Ninguno, ni siquiera Bélgica. Por eso no anuncia la independencia, es decir, la confiscación de las propiedades del Estado español y la obligatoriedad del Ejército de salir de Cataluña. Por eso y porque la mayoría de la población catalana tampoco es independentista y se empieza a poner nerviosa ante estos anuncios.
Así que de momento se confirma con el concierto catalán, es decir, la total autonomía financiera. ¿Un independentista que sólo reclama dinero? Poco independentista. Pero es que además, Mas sabe que el concierto catalán es imposible, inviable. Pero la estrategia siempre es las misma: agravios, victimismo y chupar rueda del sentimiento de desafección creciente existente en Cataluña. Lo importante: recuperar el gobierno de la Generalitat ahora que está mejor dotada que nunca.
Y mientras tanto, amagar y no dar. Como la cena que esta noche celebrarán Durán y Urkullu Una cena plurinacional para destruir al Estado en el que se han formado. Y por cierto, ¿en qué idioma odiarán a España?, ¿Quizás en español?