• El eterno aspirante a gobernar la Junta ha presentado su dimisión tras cuatro intentos de llegar al poder.
  • Zoido le sucederá hasta el próximo congreso del partido, pero podría ser su heredero definitivo.
  • El alcalde de Sevilla y presidente de FEMP carece de la imagen de señorito andaluz que tanto ha perjudicado a Arenas.
  • Cospedal, rival político del ex ministro de trabajo, se ha negado a valorar si la dimisión de éste podría abrir una crisis de Gobierno: "Es una decisión de Rajoy".
  • En una misiva, Arenas, que conserva el cargo de vicesecretario del Área de Política local y Autonómica del PP, ha descartado que piense dar el salto a la política nacional.
  • Sin embargo, muchos en su partido y fuera de él lo ven como ministrable.

En una carta muy sentida, Javier Arenas (a la derecha de la imagen junto a Rajoy y Cospedal), el hombre que tras tres legislaturas consiguió ganar las elecciones andaluzas pero volvió a perder la oportunidad de ocupar el poder, ha presentado su dimisión como presidente del PP andaluz. Nacido el día de los inocentes, "el guaperas" del partido, a sus 54 años, sigue siendo uno de los políticos con más carisma entre los populares, pero su futuro político como candidato era ya nulo y su situación, insostenible.

El texto de su dimisión, incluye frases como estas: "He decidido no presentarme como candidato a la presidencia regional en el próximo congreso de nuestro partido. Como es lógico, esta decisión la he analizado con muchos compañeros y en las últimas semanas con el presidente, Mariano Rajoy, y con la Secretaria General, María Dolores de Cospedal

Creo sinceramente que de esta forma presto un servicio a nuestro Partido y a Andalucía. En ningún caso me he planteado asumir nuevas responsabilidades en la política nacional".

La decisión es lógica. Javier Arenas se ha quemado en Andalucía, y la propia María Dolores de Cospedal, en una situación complicada dentro del seno del PP por su rivalidad, no sólo con Arenas, sino también con Sáenz de Santamaría, podría ver su poder amenazado ante la posible presencia en Madrid de un ex ministro del PP que reporta directamente a Rajoy. Al ser preguntada por si la dimisión de Arenas abre la posibilidad de una crisis de Gobierno, Cospedal ha puesto cara de póker y se ha limitado a contestar que ésa es una decisión de Rajoy. No sería descartable que el presidente del Gobierno le premiara con una cartera ministerial en cuanto tuviera ocasión.

La número dos del partido, en una rueda de prensa en la que ha alabado la figura de Arenas, ha recalcado que tiene tres vicesecretarios como él (Arenas ostenta el cargo en el área de política local y autonómica): "El Partido Popular gobierna en muchas comunidades autónomas, y por lo tanto el vicesecretario tiene una gran tarea por delante, junto con los otros dos vicesecretarios, Esteban González Pons y Carlos Floriano (…). Tendrá que dar salidas a los informes, evitar duplicidades entre administraciones, el papel de Javier Arenas va a ser muy importante".

Alguien ha llegado a preguntarle a doña María Dolores si para ella era una buena o una mala noticia que Javier Arenas pueda llegar a Madrid. La número dos del PP se ha mostrado de lo más elegante con el hombre que fue vicepresidente de Gobierno y ministro de Trabajo con el Gobierno Aznar: "Este partido debe mucho a Javier Arenas por la magnífica labor que ha llevado a cabo. Ha ganado por primera vez las elecciones autonómicas en Andalucía".

El testigo, hasta la celebración del próximo congreso del PP en Andalucía, lo deja en manos de Juan Ignacio Zoido, vicepresidente del partido en Andalucía y de su portavoz Carlos Rojas.  

Al Partido Popular se le plantea un grave problema. ¿A quién van a encontrar para sustituir a Javier Arenas no ya como presidente del PP en Andalucía, sino como candidato a la presidencia de la Junta? Zoido, presidente de la FEMP, alcalde de Sevilla y un hombre en perfecta sintonía con el presidente saliente, amén de experto en Eres falsos y trapos sucios de la oposición, tiene 'punch' y carece de la imagen de señorito andaluz que ha podido perjudicar a Arenas en sus propios dominios. A nivel nacional, el ex ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, ex ministro de Administraciones Públicas y ex vicepresidente de Gobierno, tiene aún mucho recorrido político.

Aunque ha dicho que "hoy está descartado que vaya a formar parte del Gobierno", muchos lo ven como ministrable.

Sara Olivo

sara@hispanidad.com