Se llama Amalia de León, es esposa de José María Amusátegui, y está dispuesta a defender a su esposo hasta el final. O eso parece. Fue Amalia quien presionó al vicepresidente 4º del Santander Central Hispano, Manuel Soto, para que, tras meses de no mirarse a la cara, Emilio Botín se entrevistara con José María Amusátegui.
Recuerden que Manuel Soto, ex líder de Arthur Andersen a nivel mundial, se convirtió en protagonista de la Junta de Accionistas del SCH, al dedicar 40 minutos a explicar a los propietarios del banco por qué las indemnizaciones percibidas por José María Amusátegui y Ángel Corcóstegui se ajustaban en todo a la ley. Pues eso, que Amusátegui no estaba dispuesto a que su postura no quedara clara en el discurso de Soto. Y este decidió que Botín y Amusátegui lo hablaran cara a cara. Eso sí, la jueza Teresa Palacios a lo mejor no valora mucho que los accionistas del SCH consideren que su presidente hizo muy bien en pagar 44 millones a Amusátegui y 110 a Corcóstegui para quedarse como presidente único.