Air France-KLM ganó 409 millones de euros en 2018, un 151% más respecto a 2017. Y eso que el coste del carburante aumentó en 451 millones de euros, hasta los 4.958 millones, por el encarecimiento del petróleo.
Su resultado de explotación cayó un 30,7%, hasta 1.332 millones de euros. La facturación creció un 2,5% en cifras absolutas y un 5 % en comparables, hasta 26.515 millones de euros.
La división holandesa KLM aportó 1.073 millones de euros al resultado de explotación (6 millones menos que el ejercicio anterior) con un margen del 9,8%.
Por otra parte, el coste de las huelgas en Air France fue de 335 millones de euros.