El rey Benjamín, un joven sencillo e inteligente, se enamora de Carolina, la princesa de un reino cercano, que es bella pero orgullosa y que rechaza su oferta de matrimonio. Decidido a conquistarla, viaja al Reino de Medianoche de incógnito, disfrazado de simple jardinero. Posteriormente, descubre una extraordinaria flor cantante que llega a encandilar incluso a la propia princesa. Precisamente gracias a ella y a Benjamín, Carolina aprecia que su reino está en peligro debido a malvados consejeros traicioneros que están robando a sus súbditos. Para intentar solucionarlo huye con el aparentemente jardinero en un viaje lleno de aventuras.

El espíritu, y los valores que encerraban los clásicos adaptados al cine por Disney el pasado siglo XX, los recuperan dos directores checos trasladando a la gran pantalla el cuento más famoso de su país, la inmortal historia de Božena Němcová, en lo que resulta ser una preciosa y divertida película de animación, que encierra una bonita historia de amor.

Como es usual en las películas de animación dirigidas a un público infantil, los directores de La princesa orgullosa debieron tomar decisiones al trasladar el relato literario al cine y fueron afortunados. Además de conseguir una calidad del dibujo en 3D, que nada tiene que envidiar a las películas estadounidenses, optaron porque los animales de la película, como Bijou, la encantadora perrita mascota de la princesa, se comportase como tal, es decir, es inteligente pero no habla. A ella se deben momentos muy afortunados de la película puesto que, con su obsesión por una pelota roja, provoca todo tipo de desaguisados, Aunque para personaje cómico el candidato a esposo de la princesa que desean los malvados, cuya fisonomía y vestuario grotesco provocan la carcajada.

Para llevar a buen puerto esta ambiciosa película de animación se contrataron 45 animadores y 101 artistas de diversas especialidades (diseño, modelado 3D, texturas, iluminación, efectos, composición etc..) y nacionalidades (había también españoles), que trabajaron en la película.

Como anécdota, y para los observadores, la inspiración visual de los paisajes está basada en los checos. Pero, insistimos, lo interesante de este filme es que tiene un contenido blanco, divertido, apto para todos los públicos, y que lanza mensajes sencillos como que se puede cambiar si se tiene buen corazón.

Para: los que les gusten las películas de animación para todos los públicos “sin sorpresas”, divertidas y de calidad.