Irene, una chica de 15 años que vive en un centro para menores infractores, se ha quedado embarazada. Uno de sus educadores, Javier, la convence de que no aborte y le ofrece vivir con él y su mujer Adela en la casa que tienen en un paraje aislado de la sierra para que pueda llevar a buen término su embarazo. La única condición a cambio es que acepte entregarles al bebé que lleva en su seno. Pero, a medida que pasa el tiempo, la adolescente va tomando consciencia de que el ser que habita en su interior es su hija y que quiere que forme parte de su vida.

Poniendo como eje la maternidad, el director Manuel Martín Cuenca (El autor) aborda un thriller inquietante que toca temas de rabiosa actualidad como la infertilidad y la búsqueda de soluciones a cualquier precio, los embarazos de adolescentes o los vientres de alquiler.

Con la maestría que le caracteriza, Javier Gutiérrez encarna a ese educador, un hombre que se ha involucrado en el tema porque ama a su mujer pero sigue teniendo consciencia, al menos al comienzo, de que la adolescente también tiene sentimientos.

Muy misteriosa desde las primeras imágenes, Martin Cuenca sabe dosificar el suspense con un argumento mínimo hasta un desenlace totalmente inesperado.  

 Al fondo una idea básica, todos los niños tienen derecho a tener unos padres. Pero no todas las parejas tienen derecho a tener un hijo saltándose cualquier barrera ética

Para: los que les guste el cine español de interés.