- La presidenta en España, Rosa García, hace depender el futuro laboral de la planta de Cornellà del contrato con Renfe.
- "Daría mucha carga de trabajo a nivel local, porque los motores se harían en la planta de Cornellà", dice.
- El grupo es uno de los que puja por un contrato de 2.642 millones para el suministro y mantenimiento de 30 trenes del AVE.
- Lo parecido a volver al pasado, cuando su actividad en España dependía sobre todo de los contratos públicos.
A la presidenta de
Siemens en España,
Rosa García, no se le ha ocurrido nada mejor que dar a entender que el futuro laboral de su planta de
Cornellà de Llobregat (Barcelona) depende de
Renfe. No lo ha dicho así exactamente -hubiera sonado demasiado mal-, sino de un modo más o menos parecido, que no ha sonado mucho mejor. Ha aprovechado para ello un encuentro con los medios en el marco del
Smart City Expo World Congress de Barcelona (
en la imagen), donde Siemens ha presentados sus
propuestas.
Siemens, sirva de prólogo, se ha presentado al concurso para el suministro a Renfe de 30 nuevos trenes del
AVE. Esa adjudicación, que asciende a 2.642 millones de euros, incluye además el mantenimiento posterior. Vamos, que es un contrato importante.
Pues bien, lo que ha dicho al respecto Rosa García es, en fin, que ese contrato "daría mucha carga de trabajo a nivel local, porque los motores se harían en la planta de Cornellà", que lleva años en esa labor "fabricando motores para el resto del mundo". Y a partir de ahí, saquen ustedes conclusiones.
No es una amenaza, no, faltaría más, pero sobre todo si no procediera de una empresa que ha
gozado durante años de un trato privilegiado en los contratos públicos (de ahí sus afinidades con el Gobierno de turno). Muchos de esos contratos se fueron a hacer gárgaras después, con la crisis, pero siempre es un momento para
recomenzar.
Añadan a todo eso que la multinacional alemana
está en pleno proceso de ajuste, con drásticos recortes de empleo desde principios de año. No en España,
sólo faltaría, donde ya ha prescindido de un 4% de la plantilla desde 2013.
La planta de Cornellà es una de las cuatro que Siemens tiene en España. Otra de ella está en Cataluña también: la de
Rubí. La primera produce material eléctrico y la segunda está dedicada a la fabricación de material ferroviario, motores y señalización para trenes de alta velocidad. Entre las dos dan trabajo a unas 1.200 personas.
Gran responsabilidad la de Renfe, ya me entienden, o del Estado, en este caso, que es lo mismo. Claro que ese contrato sería una oportunidad para la fábrica, y reforzaría su carga de trabajo. Como para cualquier compañía que puje por tan noble afán, ¿o no?
Al don de la oportunidad de Rosa García se une, además, que Renfe tiene previsto sacar ese contrato esta misma semana. La primera parte es el suministro de manera inmediata de 15 trenes de alta velocidad -con capacidad para circular a 320 kilómetros por hora-, y a ese pedido se añadirían otros 15 más, que la compañía pidiendo por lotes de cinco, en función de sus necesidades.
Rafael Esparza
rafael@hispanidad.com