Seguimos en casi-deflación. Publica el INE la tasa anual del Índice de Precios de Consumo (IPC) general, que en el mes de mayo es del 0,8%, siete décimas inferior a la registrada el mes anterior, que había sido empujada por los precios de la Semana Santa. Prepárense para que continúen los tipos bajos. Por su parte, la tasa anual de la inflación subyacente (índice general sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) disminuye dos décimas, hasta el 0,7%. Asimismo, la variación mensual del índice general es del 0,2%. 

Según Estadística, la bajada se debe al descenso de los precios de la electricidad y al incremento de los carburantes. Además, destaca la subida de precio de productos como las frutas, aunque el incremento es menor que en mayo de 2018.

En cuanto a los territorios, la tasa anual del IPC disminuye en todas las comunidades autónomas en mayo respecto a abril. Los mayores descensos se producen en Castilla-La Mancha, Aragón y Navarra, con bajadas de nueve, ocho y ocho décimas, respectivamente. Por su parte, Cantabria es la comunidad cuya tasa anual registra el menor descenso, cinco décimas menos que el mes anterior.

Los mayores descensos se producen en Castilla-La Mancha, Aragón y Navarra

Entre los grupos con mayor influencia negativa en la tasa, señalan los siguientes: 

  • Vivienda: baja dos puntos hasta el -0,3%, a causa de la bajada de los precios de la electricidad.
  • Transporte: alcanza una variación anual del 1,8%, casi un punto y medio inferior a la del mes pasado, debida a que los precios de los carburantes y lubricantes se incrementaron en 2018 más de lo que han subido este mes.
  • Ocio y cultura: la tasa baja un punto y medio respecto al mes anterior, hasta el 1,2%, a consecuencia, principalmente, del descenso de los precios de los paquetes turísticos.
  • Alimentos y bebidas no alcohólicas: registran una tasa anual del 0,5%, tres décimas menos que el mes anterior.

Destacan también, aunque en sentido contrario, los incrementos de los precios del pescado y marisco, que bajaron en 2018, y de la carne, que se mantuvieron estables el año anterior.