Se perderán 400.000 empleos en hostelería en 2020, según la patronal Hostelería de España
Sólo en el mes de abril se perdieron 240.000 empleos en el sector de la hostelería (restaurantes, cafeterías, bares y pubs), sin contar con los 900.000 restantes que se acogieron a un ERTE. Pues bien, si continúan las condiciones actuales de desescalada dictadas por el Gobierno, la pérdida de empleos en el sector podría elevarse hasta los 400.000 a finales de 2020, según ha confirmado este jueves a Hispanidad la patronal, Hostelería de España.
Un auténtico desastre que el Gobierno, incluso, alimenta con declaraciones como la del ministro de Consumo, el comunista Alberto Garzón, que el miércoles intentó arreglar su metedura de pata -calificó el sector turístico y de hostelería de “bajo valor añadido”- afirmando que el Ejecutivo está tratando de elevar “el valor añadido del sector en este momento”.
No señor Garzón, no es momento de subir el valor añadido, es decir, de aumentar el margen, sino de salvar el principal sector de nuestra economía. Intentar elevar el valor añadido en estos momentos es como pensar en cambiar los azulejos de la cocina mientras se quema la casa.
El Gobierno no sabe cómo arreglar el desaguisado que ha creado él mismo. La vicepresidentea y responsable de la desescalada, la muy ecologista ministra de la cosa climática, Teresa Ribera, apuesta por la vuelta de los turistas extranjeros en julio, según El Mundo. El problema es que, para que vuelvan los turistas en julio hay que comenzar a mover el negocio desde ya mismo, algo imposible en las condiciones actuales. ¿Quién va a reservar un paquete vacacional sin saber, por ejemplo, si tendrá que estar 14 días encerrado en la habitación del hotel?
Por cierto, ¿dónde está la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto? Lleva meses desaparecida (todo el estado de alarma), a pesar de la importancia de su ministerio.