El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, abrirá la próxima semana su ronda de entrevistas con los presidentes autonómicos. La primera será con el del País Vasco, Íñigo Urkullu, es decir, el 'socio' vasco de Sánchez (gracias al PNV, el socialista llegó a La Moncloa) el próximo 25 de junio y le seguirá el de Cataluña, el separatista Quim Torra, el 9 de julio. Pero no quieran ver en este orden alguna intención política porque la explicación está en que se celebrarán en función de la antigüedad de los Estatutos de Autonomía. 

Moncloa ha informado que a continuación llegará el turno de los presidentes autonómicos de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, y de Andalucía, Susana Díaz, los días 17 y 23 de julio, respectivamente. 

El orden de las entrevistas con los presidentes autonómicos se hará en función de la antigüedad de los Estatutos de Autonomía

Conviene recordar que Torra comparte 'socios' con Sánchez: se convirtió en presidente de Cataluña con los apoyos de JxCat (coalición formada por PDeCAT y CDC) y ERC; y el PDeCAT y ERC fueron dos de los nueve partidos que apoyaron la moción de censura que encumbró al socialista a la presidencia del Gobierno. Parece que muchas cosas se quedan en casa... 

Paralelamente, a la fecha de su cita con Sánchez, el presidente de la Generalitat, Quim Torra, es noticia por haber pedido por carta al Rey mantener un breve encuentro este viernes en Tarragona con motivo de la inauguración de los Juegos del Mediterráneo. El jefe de la Casa del Rey, Jaime Alfonsín, remitió esa carta al presidente del Gobierno, de acuerdo con lo dispuesto en el artículo 64.1 de la Constitución, que dispone que "los actos del Rey serán refrendados por el presidente del Gobierno y, en su caso, por los ministros competentes".

Los actos del Rey serán refrendados por el presidente del Gobierno y, en su caso, por los ministros competentes, según dispone la Constitución

La carta de Torra al Rey, firmada conjuntamente con Artur Mas y Carles Puigdemont, destacaba que la inauguración de los Juegos del Mediterráneo es una "oportunidad" para "reparar y recoser aquello que la violencia, la represión y la persecución contra el referéndum del 1 de octubre provocaron". Los firmantes de la misiva consideran que este es el momento de "abrir una etapa de diálogo" y "negociación" que acabe por "dar la palabra a la ciudadanía de Cataluña". La carta contenía una posdata firmada sólo por Torra, en la que el presidente de la Generalitat pide una reunión con el Rey este viernes para explicarle "cómo se siente una gran parte del pueblo" catalán.

En cuanto la carta fue recibida, la Casa Real trasladó la petición de Torra a la Moncloa, que cerró el círculo al considerar que toda “reunión política” debe tener lugar con el presidente del Gobierno central, Pedro Sánchez.  

El presidente de la Generalitat, vía Twitter, lamentó la respuesta del Gobierno: “Si el Rey el día 3 de octubre hizo el discurso que hizo, autorizado por el señor Mariano Rajoy, ¿ahora por qué el señor ­Pedro Sánchez no le autoriza a hablar con el presidente de Catalu­nya? ¿Queremos o no queremos diálogo?”. También desde Twitter, Carles Puigdemont acusó a Felipe VI de no ser el "rey del diálogo" sino el "rey del monólogo" del "a por ellos".

Así que Sánchez se reunirá con ‘sus socios’ Torra y Urkullu, que tienen lazos o pertenecen cuyos partidos permitieron que llegase a La Moncloa con una moción de censura a Mariano Rajoy. ¿Cuál es el precio que va a pagar Sánchez? Todavía no lo sabemos…