Por la cristofobia, hacia la III República
El vicepresidente de Vox, Víctor González y el eurodiputado de la formación Hermann Tertsch han viajado a Bolivia donde se han entrevistado con el gobierno interino de Jeanine Áñez. Este les ha proporcionado información, al parecer sensible, sobre la relaciones de Podemos con el bolivarianismo y con miembros del ejecutivo de Evo Morales, pero las ramificación de esa información llegan más lejos.
La formación de Abascal saca a escena el Foro de Sao Paulo, del que pocos medios -entre ellos, Hispanidad-, han hablado
Ante la total opacidad del Gobierno y los grandes medios, VOX ha viajado a Bolivia invitado por el nuevo Gobierno para recabar información sobre el turbio incidente en embajada de México y aclarar de una vez las conexiones entre el ex-narcodictador Evo Morales, Podemos y Sánchez. pic.twitter.com/4TzlqnK7a0
— Santiago Abascal (@Santi_ABASCAL) 2 de enero de 2020
De entrada, los parlamentarios de Vox no han querido entrar en pormenores, tanto Tertsch como el cabeza de lista para Europa, Jorge Buxadé, aluden a la financiación de Podemos -una sospecha recurrente sobre la formación de Pablo Iglesias- por parte del comunismo bolivariano y a la multinacional de ayuda mutua, a su vez financiada por el narcotráfico, que representa el actual marxismo hispanoamericano. De postre, la relación entre esa internacional comunista y el Foro de Sao Paulo, una peligrosa organización cristófoba que intenta expandir el comunismo, el aborto y la ideología de género por toda Iberoamérica. Y recuerden que casi la mitad de los católicos del mundo habla español o portugués.
Vox analiza los datos para darles curso: judicial, parlamentario o periodístico
En cualquier caso, ahora Pablo Iglesias se dispone a ocupar cargo de vicepresidente. Y lo cierto es que la financiación de Podemos y sus lazos con países como Venezuela, Bolivia e Irán, sobre todo, en el arranque de Podemos como partido político, siguen sin esclarecerse.