Desde el otro lado del océano Atlántico, Neoenergia da algo de alegría a Iberdrola a cuenta de sus resultados de 2020, pues ha ganado 431 millones de euros, un 26% más. Eso sí, en bolsa no lo nota, porque su cotización está en niveles muy similares a los de su debut de junio de 2019: 18,70 reales brasileños (2,85 euros) el pasado martes, frente a los 15,65 reales (2,39 euros) de su debut y los 16 reales (2,44 euros) del 26 de junio de 2019… y bastante lejos de su máximo histórico hasta la fecha (26,75 reales -4,08 euros- registrado el 7 de febrero de 2020).

La filial brasileña, de la que Iberdrola controla el 50% más una acción, tiene una capitalización bursátil de casi 3.460 millones de euros. Volviendo a los resultados, ha elevado un 14% su Ebitda, hasta los 996,54 millones de euros, gracias a que en el cuarto trimestre se disparó un 39%, y a pesar del impacto negativo de 40,2 millones por el Covid-19 (que provocó la caída del mercado y un aumento de la morosidad). Un incremento similar al que han tenido sus ingresos, que se han situado en 4.780 millones (+13%); margen bruto, que ha sido de 1.570 millones (+12%); y deuda bruta consolidada, que ha ascendido a 3.650 millones (+11%), y que en parte, se debe a las inversiones, que se han disparado un 44%, a 971,78 millones.

Neonergia ha distribuido por la red 66.857 gigavatios hora (Gwh) en 2020, muy similar a la del año anterior, aunque ha descendido ligeramente un 1,5%. Su producción eléctrica ha sido de 13.121 Gwh, gracias a una capacidad instalada de 4.079 megavatios (MW) -516 MW de eólica terrestre, 3.031 MW de hidroeléctrica y 533 MW de ciclos combinados-. Además, ha aumentado un 1,7% su base de clientes, hasta unos 14,3 millones.