- El presidente francés viaja a Berlín para reunirse con la canciller alemana, Angela Merkel, en lo que será su primer viaje al extranjero.
- Respecto a Europa, se espera que siga la política de sus antecesores: un gran eje franco-alemán.
- Veremos si los alemanes le aceptan como socio a su misma altura.
Emmanuel Macron tomó ayer domingo posesión como presidente de Francia con un discurso en el que se comprometió a trabajar para devolver a los franceses "la confianza en sí mismos".
Tras elogiar la labor de su antecesor en el cargo,
François Hollande, el líder del centrista movimiento En Marcha! también reiteró su compromiso con una "Europa unida", esgrimido durante la campaña electoral en contraposición al referéndum para la salida de Francia de la UE planteado por su rival en la segunda vuelta de las presidenciales, la ultraderechista
Marine Le Pen. "La Europa que todos necesitamos será refundada y relanzada: Europa nos protege y nos permite llevar nuestros valores al resto del mundo", concluyó.
Hoy, de hecho, Macron viaja a Berlín para reunirse con la canciller alemana,
Angela Merkel, en lo que será su primer viaje al extranjero
después de asumir el cargo, según confirmó este domingo el Palacio del Elíseo, recogen
agencias.
Y es que Macron ya anticipó nada más ganar las elecciones presidenciales, el pasado
7 de mayo, que intentaría verse "lo antes posible" con Merkel, para ponerse al día sobre los asuntos regionales, entre los que destaca el desafío del
Brexit. Eso sí: ahora hay que ver si los alemanes le aceptan como un par.
Es posible interpretar, por tanto, que la prioridad en política exterior del nuevo presidente francés vaya a ser la de sus antecesores: mirar a Berlín,
al otro gigante europeo, para seguir con el eje franco-alemán. Y olvidarse de los pequeños, como Italia o España.
En otro orden de cosas,
se espera que Macron, que ya ha designado a su equipo para el Elíseo, nombre al primer ministro y al Gobierno este lunes, si bien la continuidad del Ejecutivo está condicionada a la decisión que tome el
Parlamento surgido de las elecciones legislativas del próximo junio, que podrían dar lugar a una nueva cohabitación.
Andrés Velázquez
andres@hispanidad.com