Mackenzie Scott, la exesposa del fundador de Amazon, Jeff Bezos, y una de las personas más ricas del mundo, ha donado en pocos meses casi 6000 millones de dólares a causas benéficas. Pero no se crean que esta mujer, que ayudó a su entonces marido a crear su imperio, piensa quedarse ahí.

Scott -que no su ex Bezos- se sumó a The Giving Pledge, una campaña filantrópica en la que los grandes multimillonarios del mundo se comprometen a donar al menos la mitad de su fortuna en vida.Y así, la multimillonaria -que obtuvo 38.000 millones de dólares de su divorcio con Bezos- dejaba patente en su blog el compromiso de «devolver la mayor parte de mi fortuna a la sociedad que ayudó a crearla». Y aseguraba que proseguiría con esta misión «hasta que la caja fuerte esté vacía»... ¿a qué no? Y menos ahora que acaba de casarse de nuevo, con el profesor de química del colegio privado donde estudian los hijos de Scott y Bezos. 

Mientras se lleva a cabo el vaciado de sus arcas -tarea que sospechamos llevará un tiempo- Scott ha donado alrededor de 5700 millones de dólares, repartidos entre pequeñas organizaciones sin ánimo de lucro, instituciones educativas para estudiantes negros, bancos de alimentos o ayudas contra la Covid-19.

Según publica XLSemanal, la iniciativa de MacKenzie Scott, con sus generosas donaciones tiene que ver con una toma de posición ante la situación social en la que se encuentra Estados Unidos: «Esta pandemia ha sido una bola de demolición en la vida de aquellos americanos que ya tenían que pelear para salir adelante. Las pérdidas económicas y las consecuencias sobre la salud han sido mucho peores para las mujeres, para las personas de color, para aquellas que viven en la pobreza. Al mismo tiempo, las fortunas de los multimillonarios -por ejemplo, la suya- han crecido de forma considerable». 

En cualquier caso, que le tomen la palabra.