La evolución de la acción es una de las mayores preocupaciones de los accionistas minoritarios del Santander. Ha sido uno de los asuntos estrella de la Junta celebrada este viernes en la capital cántabra. No están contentos, y así lo ha dicho uno de ellos: cuando fue nombrada presidenta, tras la muerte de Emilio Botín –“cuánto echo de menos a su padre”, le ha dicho- la acción valía 7,70 euros. Ahora está a 4,52. Es decir, “desde que llegó a la Presidencia, la acción ha caído un 42,85%”. En su respuesta, Botín se ha escudado en que la bolsa está castigando a todos los bancos europeos y que el Santander nada puede hacer contra eso.

A los accionistas tampoco les convence el dividendo. “Prefiero los 0,60 euros de dividendo que nos daba su padre, a los 0,20 que nos da usted”, le ha dicho el accionista anterior que también se ha quejado de las remuneraciones, que han subido dos veces desde 2014. “Ustedes cobran el máximo y nosotros el mínimo”, ha señalado. La sala le ha despedido con un sonoro aplauso.

Otro minoritario: “Las excusas para no fichar a Orcel no se las cree nadie... Corcóstegui se llevó 110 millones de euros”

Andrea Orcel también ha estado presente. “Las excusas para no fichar a Orcel no se las cree nadie”, le ha dicho otro minoritario, que le ha recordado a Botín que Corcóstegui percibió hasta 110 millones de euros, cuando abandonó el banco. Efectivamente, el fichaje no se frustró por los 50 ‘kilos’, sino porque Orcel llegaba para hacerle el juego sucio a los fondos y trocear el banco, como adelantó Hispanidad.

En cualquier caso, la operación no ha sentado bien entre los accionistas. “Usted debe dimitir”, le ha dicho un minoritario a Botín, para “recuperar el prestigio” del banco.

El Santander está apunto de negociar el ERE tras la integración de la red del Popular. Pues miren qué curioso, no ha habido ninguna intervención de los sindicatos. Contrasta, por ejemplo, con las juntas del BBVA y Caixabank, donde los representantes de los trabajadores aprovechan para mostrar sus posturas y denunciar lo que no marcha bien. Será que en el Santander están todos hiper contentos, incluso en vísperas de un ERE que podría afectar a unos 3.000 empleados. Raro.

Por cierto, en vísperas del ERE por el Popular, los sindicatos han brillado por su ausencia, justo lo contrario a lo que hacen en BBVA y Caixabank

No sindicatos, pero sí muchas ONGs. Por ejemplo, la Fundación para la defensa del oso pardo. No es broma. Como tampoco lo ha sido la intervención de Cáritas. ¿Qué hace Cáritas en la Junta del Santander? ¿Es que Caritas se dedica a especular en bolsa? Por cierto, la representante de esta ONG ha desvelado, sin querer, lo que piensan algunos acerca de las intervenciones en la Junta del Santander: “Gracias a la presidenta por hacer posible que estemos hoy aquí”, ha dicho. ¿Comprenden?

Está claro que la Junta de Accionistas del Santander no es como las demás. Y es que a los minoritarios del primer banco español les preocupa más el cambio climático (cuatro intervenciones) que el Bréxit (una sola). Este sí que es un banco moderno.

Por cierto, en la mañana de este viernes, la entidad ha anunciado la Opa para la adquisición del 25% de Santander México que aún no controla. Es una vuelta al año 2012, cuando el banco dio el salto al parqué por petición del Gobierno mexicano. El BBVA no hizo ningún caso, pero el Santander sacó el 25% de su entidad. Ahora, hará lo contrario: si acude el 100% de los accionistas, excluirá el banco de bolsa.