Los bancos que quiere el BCE, grandes y pocos rentables, el resto sobran
Los principales bancos europeos no valen lo mismo en bolsa, según su capitalización, aunque la obsesión del BCE es que cuanto más grandes sean, mejor. Paradójicamente, en esa lista hay dos españoles, Santander y BBVA, caracterizados por su fuerte en la banca doméstica -la lección del sur al norte- y menos dependientes de la banca de inversión, lo que ha hecho tambalearse a entidades como el germano Deutsche Bank, que se ha desgastado hasta tal punto que vale la mitad que hace año.
El BCE quiere bancos grandes, con exigencia constantes de recursos propios, aunque sean menos o poco rentables. Eso, a Draghi le da igual que le da lo mismo. La recopilación de datos da una idea del peculiar ranking por el valor en bolsa, que lidera el Santander con un valor de 76.170 millones en estos momentos, aunque hace dos meses era de 88.000 millones, según los datos recopilados entonces por el Instituto Coordenadas de Gobernanza y Economía Aplicada.
La mayor parte de los diez primeros bancos europeos valen menos de 40.000 millones en bolsa
Le siguen el francés BNP Paribas, con 72.200 millones, aunque en marzo era de 78.000, y el holandés ING, que vale 49.700 millones, aunque hace dos meses superara por 4.000 el nivel de los 50.000. El resto están por debajo de esa cota.
En el siguiente peldaño está el italiano Intesa Sanpaolo, con 41.900 millones. Hace dos meses estaba justo en la línea divisoria de los 50.000, seguido de otro español, el BBVA, con 39.940 millones (44.000 en marzo), casi la mitad que el primero, el Santander. En cualquier caso completa la lista de los cinco primeros.
La diferencia es más acusada con el resto de la clasificación, hasta completar el top 10, con el francés Credit Agricole, 34.380 millones (38.000 en marzo), el italiano Unicredit, 32.240 (37.000 en marzo) y el noruego Nordea Bank, en torno a 30.000.
Completan esa lista el francés Société Générale, el belga KGC, Deutsche Bank y el holandés ABN Amro. El primero es el único de ellos que supera los 30.000 millones (31.750 en concreto, frente a los 36.000 en marzo). KGC está en 28.180 (frente a 31.000), Deutsche en 20.740 (frente a 25.000) y ABN, algo por encima de 20.000, cuando todo pintaba con otros colores y las previsiones de revalorización en el año eran muy optimistas, entre el 18% y el 10%.