El AVE a La Meca, valorado en 6.700 millones, ha tenido conflictos, sobrecostes y retrasos
España ha vuelto a agachar la cabeza ante Arabia Saudí, como se ha podido ver en su mínimo e irrelevante papel en la inauguración del AVE a La Meca el pasado 25 de septiembre. Las autoridades saudíes vetaron la presencia de altos cargos españoles, según El Mundo, aunque fuentes del Ministerio de Fomento han señalado a Hispanidad que no ha habido veto, sino que se trataba de un “evento privado”.
Por eso nadie del Gobierno ni de la Casa Real ha asistido al mismo, algo que llama mucho la atención y más cuando se trata del mayor proyecto español en el exterior. También resulta curioso que ni el rey Felipe VI ni el emérito (Juan Carlos) hayan acudido, pues tienen bastante amistad con la dinastía saudí: en enero de 2015, Felipe VI viajó a Riad por la muerte del rey Abdalá bin Abdulaziz; dos años después, realizó su primera visita oficial a aquel país y el pasado abril, recibió al príncipe heredero saudí, Mohammad bin Salman, en su visita a España para firmar un acuerdo con Defensa de compra de material militar. Además, Juan Carlos viajó en enero de 2015, días después que su hijo, a título particular, para poner paz entre el consorcio y las autoridades españolas, y ha mediado en otras ocasiones
El 'megaproyecto' de 6.700 millones de euros no ha estado exento de conflictos, sobrecostes y retrasos
Recuerden que la segunda fase (la primera fue obra de un consorcio franco-chino-saudí) del AVE a La Meca está valorada en más de 6.700 millones de euros y fue adjudicada en octubre de 2011 a un consorcio de doce empresas españolas (Renfe, Adif, Talgo, Indra, Cobra, OHL, Copasa, Dimetronic, Inabensa, Imathia, Consultrans e Ineco) y dos saudíes (Al Shoula y Al Rosan). La firma oficial tuvo lugar a principios de 2012 y desde entonces no han faltado los problemas por sobrecostes y retrasos que en más de una ocasión lo han puesto en peligro.
Por todo esto, no se entiende que ni Gobierno ni Casa Real asistieran a la inauguración de este ‘megaproyecto’, un acto que presidió el rey saudí, Salman bin Abdelaziz, y el príncipe heredero. De hecho, nuestro país tuvo como únicos representantes al embajador de nuestro país, Álvaro Iranzo, el presidente del consorcio, Jorge Segrelles, y los de Talgo, Carlos de Palacio y Oriol, y de Consultrans e Imathia, Julián García Valverde. Eso sí, el próximo jueves, Isaías Táboas, presidente de Renfe, asistirá al primer viaje comercial del AVE saudí, según han confirmado fuentes de Fomento.
El presidente de Renfe, Isaías Táboas, asistirá al primer viaje comercial del AVE saudí el próximo jueves
El único motivo del ‘veto’ se debe a toda la polémica causada por la ministra de Defensa, Margarita Robles, al paralizar la venta de 400 bombas -ya pagadas- y que puso en aprietos el contrato de construcción de cinco corbetas por parte de Navantia. Al final, Robles tuvo que rectificar y enviar las bombas a los saudíes.
Y ojo, porque el AVE a La Meca no es el único proyecto made in Spain en Arabia Saudí: FCC está construyendo uno de los lotes del metro de Riad, tiene previsto inaugurar estaciones en 2019 y finalizarlo todo en 2036. Además, otras empresas españolas (OHL, Acciona, Ferrovial, ACS, Técnicas Reunidas…) tienen importantes contratos en Oriente Medio.
Margarita Robles es la culpable del 'veto' por la polémica de paralizar la venta de 400 bombas, aunque tuvo que rectificar
Por último, conviene destacar que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez ha dejado casi sin viajes al Rey en estos cuatro meses, pero él ha hecho ya un total de 15, como informa ABC. Eso sí, aún no se ha atrevido a visitar Marruecos, que tradicionalmente, era el primer destino en el exterior del inquilino de La Moncloa.