• El robo de información a 1.000 millones de cuentas pone en guardia a millones de usuarios.
  • Pero es Google el que tiene el monopolio con su buscador, su navegador, Android, Gmail y Youtube.
  • Sólo Yahoo pudo hacerle sombra, pero ha pasado de firma legendaria a firma inquietante.
  • Las dudas se disparan: está en juego la seguridad y privacidad de los datos personales.
Llueve sobre mojado en el peligroso andamiaje de Yahoo, que ha pasado en unos años de ser una de las firmas legendarias de Internet a un incuestionable reflejo de las dudas que despierta la Red sobre la seguridad y privacidad de los datos personales. Obviamente, la incertidumbre nunca es ociosa y se despierta, llegado el caso, con incidentes como el que ha reconocido la multinacional americana: que le han robado información privada de más de 1.000 millones de cuentas de usuarios. Añade Yahoo que no ha sido capaz de identificar al pirata informático y que el ataque tuvo lugar en agosto de 2013. Ahora, no sólo son más los atacados sino también las nuevas prácticas desveladas (como el uso de los cookies para infiltrarse en las cuentas). La noticia la ha dado en un comunicado la propia Yahoo y llega apenas dos meses después del anuncio de otro ataque cibernético similar, en 2014, que afectó a 500 millones de cuentas. Eso le costó que Verizon se replantee la compra del negocio de Yahoo por 4.830 millones de dólares. La pregunta, en cualquier caso, vuelve: ¿son más seguras Google, Facebook o Microsoft en lo que la privacidad en Internet se refiere? El interrogante no es baladí si añadimos que Google tiene de facto el monopolio de los buscadores, con el 89,38% de cuota de mercado, reducida al 3,3% en el caso de Yahoo, por debajo del buscador de Microsoft (Bing, 4,2%) y Baidu (el google chino, 0,71%). Y no sólo buscadores. Añadan en la lista de ese monopolio a su navegador, su sistema operativo Android, su correo electrónico Gmail, Youtube y el 65% del mercado publicitario en Internet. No es poco: es el fruto de la nueva economía, nacida para acabar con los monopolios, pero que ha acabado en monopolio. Inquietante. Esa situación lleva aparejada otra consideración inevitable. Los datos personales han estado protegidos tradicionalmente por los Estados y ahora dependen de mecanismos que pueden ser un colador, como prueban los ataques a Yahoo, más agravados por un monopolio consentido en el caso de Google. Demasiada incertidumbre. Y esa incertidumbre aumenta si añadimos al respecto que la propia Yahoo, que dirige Marissa Mayer (en la imagen), espió correos electrónicos de sus usuarios para la inteligencia de EEUU. Y a eso se añade, más grave todavía, es que la ejecutiva, que antes trabajó en Google, no dejó dudas de que Yahoo! trabaja para la Casa Blanca, al igual que Google, Facebook o Microsoft. Una cosa está clara ahora, con el nuevo ataque reconocido por Yahoo: la información robada incluye nombres, direcciones de correos, respuestas a las preguntas de seguridad. Menos mal que no afecta a los datos de las tarjetas de pago o las contraseñas recompuestas, de acuerdo a Yahoo. Rafael Esparza