- "No podemos vender nuestros periódicos al público en el mercado, no podemos colocar nuestro nombre en las historias de persecución", dice un periodista paquistaní.
- "No puedo practicar mi confesión libremente en mi país y expresar las enseñanzas de Cristo en los artículos", añade un periodista indonesio.
Los pasados días 10 y 11 de marzo se celebró la 'Asia Journalists Roundtable', organizada por SIGNIS, la
Asociación Católica Mundial para la Comunicación, en el Centro Ecuménico del Consejo de Iglesias de Malasia (CCM), en la
Jalan University de Selangor (
Malasia). A la conferencia asistieron 20 periodistas de 13 países asiáticos, informa
Asianews.
En el encuentro se abordó la situación de los
periodistas cristianos perseguidos por su fe en Asia. El tema de la mesa redonda fue 'Esperanza y confianza en la comunicación en nuestro tiempo'. La mayoría de los periodistas informaron de que ser cristiano, en esos países, es un verdadero reto en el campo de la comunicación.
"No podemos vender nuestros periódicos al público en el mercado,
no podemos colocar nuestro nombre en las historias de persecución". Así lo afirmó un periodista católico paquistaní, testimoniando las dificultades que enfrentan las personas como él que pertenecen a minorías religiosas y encuentran obstáculos en el ejercicio de la profesión.
En
Pakistán no es fácil entrar en el campo del periodismo y los medios de comunicación si se pertenece a las minorías religiosas. "Estamos realmente unos pocos -añade- tanto es así que nos podemos contar con los dedos de una mano."
Yohanes Agus Ismunarno, periodista
indonesio, comparte las mismas dificultades: "Yo trabajo como director de un órgano de prensa oficial, pero no puedo usar mi nombre de pila. No puedo practicar mi confesión libremente en mi país y expresar las enseñanzas de
Cristo en los artículos".
Otro tema de la reunión fue la proliferación de información falsa, cada vez más común en un mundo donde es difícil comprobar la fiabilidad de las fuentes. Para ello, dice
Alan John, director de Asia
Journalism Fellowship, la tarea del periodista se vuelve aún más importante.
La filipina Perry Lamanilao Pablo añade: "Es necesario hacer llegar información de primera mano y siempre consultar con extrema precisión las historias que contamos." Según Cheng Chomneth, camboyano, "el periodista debe recuperar la confianza en los principios rectores de la profesión".
José Ángel Gutiérrez
joseangel@hispanidad.com