Mientras la 'ley Celaá' avanza en su tramitación, parte de la nueva legislación ha chocado con el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña. El TSJC ha admitido las medidas cautelares solicitadas contra la resolución de la Generalitat que denegaba la renovación de los conciertos de Primaria a las escuelas que separan por sexo.

En un auto, consultado por Europa Press, el tribunal señala que acuerda suspender “únicamente” la parte de la resolución de la Conselleria de Educación de la Generalitat que acuerda no renovar los conciertos, y estipula como medida cautelar concederlo de la misma manera que se ha hecho para los que sí se renovó por un periodo de seis cursos, a contar a partir del inicio del curso 2020-2021.

Según La Razón, la Conselleria de Educación había denegado la renovación de unidades concertadas a diversas escuelas catalanas que diferencian por sexo para asegurar la coeducación en todo el Servicio de Educación de Cataluña, pero les había concedido un año de prórroga.

El TSJC se ampara en una resolución de 2018 del Tribunal Constitucional que consideraba que la educación diferenciada es “un modelo educativo más”.