Caixabank no logra convencer a los inversores a pesar de disparar el beneficio tras la fusión con Bankia
Este jueves 6 de mayo de 2021 se han publicado los resultados del primer trimestre de Caixabank. Trimestre importantísimo para el grupo y para todo el sistema financiero español ya que, como saben nuestros ávidos lectores, Caixabank se fusionó con Bankia, la antigua Caja Madrid, a finales de marzo de 2021, lo que ha supuesto un evidente impacto sobre la cuenta de resultados del grupo. En el mercado bursátil, el precio de cotización de Caixabank ha descendido durante la mañana en un 2,89% desde los 2,7 euros del cierre de ayer. Ahora su precio es de 2,62 euros. El precio de la acción del grupo ha mantenido una senda ascendente desde el 26 de abril de 2021, acumulando hasta el 3 de mayo un incremento aproximado del 7%, una pena que las cosas hayan cambiado hoy.
Los resultados del grupo en el primer trimestre, sin reconocer los resultados extraordinarios de la fusión con Bankia, han sido superiores en un 471% a los del primer trimestre de 2020, cambiando la senda de decrecimiento porcentual vista en los últimos trimestres anteriores del grupo. El resultado consolidado de Caixabank ha sido de 514 millones de euros, frente a los 90 millones de euros del primer trimestre de 2020. Si bien, este incremento ha sido bastante importante, esperen a ver si incluimos los efectos de la fusión con Bankia. El resultado atribuido al grupo Caixabank-Bankia ha sido de 4.786 millones de euros. No ponemos la variación porcentual de la cifra con respecto al mismo trimestre del año anterior ya que ambas cifras no serían comparables, al no haberse producido la fusión entre ambos grupos financieros.
Expliquemos de manera breve a qué se debe dicho incremento. No se debe a motivos políticos, y si lo dice el Gobierno o alguno de su séquito no les crean. El incremento del resultado desde los 504 millones de euros ex Bankia a los 4.786 millones de euros con Bankia se debe a una cuestión de fondo de comercio. De manera breve, el fondo de comercio aflora cuando en una adquisición el precio de mercado pagado por una compañía es inferior a su valor contable o en libros. Es decir, Caixabank ha pagado el precio de mercado de Bankia, no se llamen a engaño, el cual ha sido con un descuento sobre el valor contable del grupo de aproximadamente, tras aplicar ajustes, de 4.282 millones de euros. Esto no indica que Caixabank sea más lista que nadie ni que haya comprado barato, sino que el mercado prevé que los activos de Bankia valen menos al mercado de lo que reflejan sus cuentas y, por ello, en caso de venta de los mismos, Caixabank no los vendería en mercado por el precio que aparece en libros. Esta es la verdad contable, ni más ni menos.
Una vez explicado el principal efecto que ha ocasionado la fusión con Bankia en el resultado de Caixabank, pasemos a analizar las cifras del grupo obviando dicha fusión.
El margen de intereses únicamente ha descendido en un 0,7%. Tranquilos, al menos las comisiones netas han aumentado en un 0,2%. Y seguimos con las buenas noticias cuando llegamos a la línea de margen bruto, el cual ha aumentado en un 4% en iguales términos comparativos. De igual manera, ha aumentado la cifra de margen de explotación, desde los 796 millones de euros a los 874 millones de euros, lo que supone un incremento interanual del 9,8%.
Vayamos con la solvencia y liquidez. Caixabank las ha reforzado. La principal ratio de solvencia, CET1 (Common Equity Tier 1) fue a cierre de 2020 del 13,6% pasando a ser del 14,1% en el primer trimestre de 2021, lo que supone un incremento del 0,5%. Además, la ratio de apalancamiento también nos deja buenas sensaciones, situándose en un 5,5%, un 0,1% inferior respecto al cierre de 2020. Respecto a las principales ratios de liquidez, el LCR del grupo ha sido de un 273%, superior en 25 puntos porcentuales a la cifra de cierre del año anterior, y la ratio NSFR se ha situado en un 146%, 1 punto porcentual superior, en iguales términos comparativos.
La ratio de morosidad ha empeorado -no iba a ser todo positivo- y ha pasado de un 3,3% a un 3,6%.
Como conclusión, sólo diremos que esperemos que el devenir del nuevo grupo financiero Caixabank-Bankia nos traiga muchas alegrías a los inversores. Este jueves no ha sido uno de esos días, pero no se apuren, la esperanza es lo último que se pierde.