- La revisión de esos planes sitúa ahora las inversiones previstas por Petrobras en 130.300 millones de dólares, frente a los 220.600 millones que calculaba en sus proyecciones anteriores.
- Y la presidenta brasileña y algunos de sus ministros presentan en Nueva York un paquete de obras de infraestructura con el que esperan atraer inversiones.
- Los economistas proyectan una contracción económica para este año, pero Rousseff dice que Brasil aún tiene fundamentos fuertes que deberían atraer a inversores a largo plazo.
La petrolera estatal brasileña
Petrobras, inmersa en un sonado caso de corrupción, anunció que ha decidido reducir un 37 % las inversiones que tenía previstas para el período 2015-2019, informa
Efe.
La revisión de esos planes, que consta en un informe enviado a la Bolsa de Sao Paulo, sitúa ahora las inversiones previstas por la empresa en 130.300 millones de dólares, frente a los 220.600 millones que calculaba en sus proyecciones anteriores.
"La cartera de inversiones dará prioridad a los proyectos de exploración y producción de petróleo en Brasil, con énfasis en el presal", dice el comunicado, en alusión a los yacimientos situados en aguas profundas de Atlántico que la empresa descubrió hace casi una década.
Pero lo curioso es que mientras Petrobras reduce sus planes de inversión un 37%, al mismo tiempo, la presidenta de
Brasil Dilma Rousseff (
en la imagen) busca inversores en EEUU para su país. "Necesitamos reducir los riesgos de hacer negocios en Brasil", dijo durante una visita a las oficinas de
The Wall Street Journal en Nueva York, al inicio de su recorrido por Estados Unidos para atraer inversionistas y reunirse con el presidente
Obama en Washington D.C.
La presidenta brasileña y algunos de sus ministros están en Nueva York para presentar ante inversionistas un paquete de obras de
infraestructura con el que esperan atraer inversiones, en momentos en que los mayores contratistas de Brasil se encuentran enredados en un escándalo de corrupción al interior de la estatal petrolera Petrobras.
Pero las pobres condiciones económicas en Brasil complican esta tarea, incluyendo una inflación anual de 8,8% sumadas a unas tasas de interés en 13,75%. Los economistas proyectan una contracción económica para este año, pero Rousseff dice que Brasil aún tiene fundamentos fuertes que deberían atraer a inversores a largo plazo.
José Ángel Gutiérrez
joseangel@hispanidad.com