• El extesorero del PP ha negado en el macrojuicio del caso Gürtel que en el PP se hicieran pagos en negro a proveedores del partido, retractándose así de su declaración de abril de 2014.
  • "Ninguna de las empresas de Correa ha recibido cantidades en efectivo. Desde la sede central del PP todo se pagaba oficialmente", ha dicho.
  • Y fue Rajoy quien decidió cortar la relación del PP con las empresas de Correa, ha explicado.
El extesorero del PP Luis Bárcenas (en la imagen) ha admitido que él y el también extesorero Álvaro Lapuerta llevaban una "contabilidad extracontable" para el PP en la que se reflejaban donativos de empresarios, pero la ha calificado de algo "absolutamente inocuo" con lo que estos no buscaban influir en las adjudicaciones públicas, recogen agencias. "No se contabilizaban oficialmente, es obvio, pero se llevaba un control de entradas y salidas". Ha reconocido como suyos los llamados "papeles de Bárcenas", pero ha subrayado, ante las insistentes preguntas de la fiscal, que ambos tesoreros recogían "donativos que no tenían carácter finalista, no se correspondían a una gestión". En el macrojuicio del caso Gürtel ha negado que en el PP se hicieran pagos en negro a proveedores del partido, retractándose así de su declaración de abril de 2014. "Ninguna de las empresas de Correa ha recibido cantidades en efectivo. Desde la sede central del PP todo se pagaba oficialmente", ha dicho, recogen agencias. "No he recibido nunca nada del señor Correa ni para mí ni para el PP", ha señalado el extesorero del PP, negando así la declaración del presunto cabecilla de la trama, Francisco Correa, que dijo que le pagaba cantidades que rondaban entre el 2 y el 3% del montante de las adjudicaciones públicas en las que Bárcenas habría intercedido gracias a sus buenas relaciones en varios ministerios, y mencionó contratos de carreteras, autopistas, del AVE o de medio ambiente. De este modo, Bárcenas ha negado que las iniciales 'L.B.' que aparecen en la documentación aportada por Correa sean las suyas. "Pensar que el señor Florentino Pérez o el señor Villar Mir puedan acudir al gerente del partido y al señor que le hace los viajes al partido para le otorguen adjudicaciones es una idiotez", ha argumentado Bárcenas, añadiendo que ambos empresarios tenían contactos directos con el PP. También ha justificado que las donaciones hechas por empresarios al partido y que recogía el extesorero Álvaro Lapuerta no tenían "carácter finalista", es decir, no buscaban condicionar al PP, y que pretendían algo "inocuo" como servir para que les abrieran la puerta en el partido. A preguntas de la fiscal, Bárcenas ha afirmado que mantuvo una relación profesional con el considerado cabecilla de la trama Gürtel, Francisco Correa, desde 1993 hasta 2003, del tipo "proveedor-empresa". A su juicio, "Correa era un señor que gestionaba muy bien sus negocios", pero "se le subió a la cabeza el nivel de relaciones que tenía". "Se sentía una persona importante y llegó a pensar que el partido era suyo", ha afirmado, en presencia del propio Correa y del supuesto número dos de la trama, Pablo Crespo. Bárcenas ha afirmado que fue el actual presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, quien decidió cortar la relación del PP con las empresas de Correa tras ser avisado por un empresario de sus actividades ilícitas. Desmiente así la declaración que hicieron Correa y Crespo acerca de la razón por la que dejaron de trabajar para el PP, por una supuesta mala relación de Crespo con Rajoy o por la contratación en las empresas de Correa de un antiguo colaborador de José María Aznar. Andrés Velázquez andres@hispanidad.com