Siguen llegando a la cartelera, con cierto retraso, las  películas nominadas a los Oscar. Este magnífico drama, que gira sobre el dolor y la culpa, ha logrado seis en importantes categorías, entre ellas mejor película, director, guión original y actor protagonista. La vida de Lee Chandler, un asocial conserje de Boston, da un brusco giro cuando fallece, repentinamente, su único hermano y descubre que éste le ha nombrado el tutor legal de Patrick, su sobrino adolescente. Si esta responsabilidad le pesa como una losa, todavía le supone una mayor carga regresar al pueblo natal donde creció y enfrentarse a su pasado… Buena muestra de lo que se denomina cine de personajes, lo importante de este relato, emotivo pero nunca sensiblero, es cómo refleja la manera de afrontar el dolor y la pérdida tanto del tío como del sobrino, que se sienten huérfanos tras fallecer ese hombre bondadoso que siempre fue el motor de cohesión de la familia. Una relación beneficiosa para ambos, sobre todo para Lee, que despertará de un largo letargo y volverá a encontrar sentido a su vida al tener que intentar olvidar sus penas para cuidar de un optimista muchacho de 16 años que ha perdido a su padre, a su referente, pero que sigue teniendo ganas de comerse el mundo. El desarrollo de los hechos se toma su tiempo, y el suspense de ese pasado de Lee, que sobrevive con un gran sentido de culpa, lo descubrimos mediante acertados flash-back, bien incorporados en el montaje gracias al eficiente trabajo de Jennifer Lame (Ciudades de papel). Otro apartado que nos introduce en ese ambiente es la excelente banda sonora, que alterna temas clásicos con canciones actuales. Lo único más facilón, y menos elegante, de este filme es la permisividad que ese tío le consiente al sobrino ligón  para tener escarceos sexuales con sus dos "novietas". Casey Affleck está portentoso en su encarnación de un hombre roto, bien secundado por el joven Lucas Hedges y Michelle Williams (ambos nominados a los Oscar como mejores actores secundarios). Y junto a un guión bien hilado consigue que nos encontremos ante un drama que merece la pena. Para: Los que les gusten los buenos dramas y las buenas interpretaciones Juana Samanes