• A los niños, antes que en catalán o en castellano, hay que educarles en la libertad de los Hijos de Dios.
  • Con el bono escolar tampoco habría ningún problema en Cataluña.
A ver, es cierto que el Tribunal Constitucional se ha ido por las ramas leguleyas. Lo que siempre hacen los malos jueces (que no he dicho que sean multitud, sólo que lo sospecho): irse a la forma para evitar entrar en el fondo de la cuestión. Lo cierto es que, con su fallo, ha vuelto a otorgar razón a la Generalitat en su intento de imponer el catalán a los niños, como lengua casi única, desde la escuela primaria. Pero eso no es lo más grave que está ocurriendo con la educación, ni en Cataluña ni en la del resto del país. Lo más grave es el lavado de cerebro de los chavales, que se logra sustituyendo a Cristo por unos llamados valores ciudadanos… que no son otra cosa que los valores de un Estado, sea el catalán o el español, para forjar unas generaciones dóciles… que es lo que gusta a los políticos, sean de izquierdas o de derechas, centralistas o separatistas. El chaval lo que necesita es ser educado en la libertad de los hijos de Dios. Para los padres que quieran libertad de enseñanza, que recurran al bono escolar. Porque así, entre otras cosas se les podría educar a los niños, en castellano, en catalán y en mediopensionista. O sea, con libertad. Eulogio López eulogio@hispanidad.com