El presidente de Telefónica, Marc Murtra, ha alcanzado la misma cota de sinceridad que su jefe, Pedro Sánchez. Como primer presidente socialista de la operadora, Murtra ha puesto en marcha un ERE que afectaría primero a 5.300 empleados, luego a 5.700 y finalmente ya supera los 6.000. Todo muy de izquierdas.
Por cierto, ¿más de la tercera parte de la plantilla de Telefónica estaba cruzada de brazos?
Ahora bien, las mentirotas no acaban ahí: ni el ERE es voluntario ni la condiciones para los afectos serán las mismas.
En el corporativo, innovación y seguridad, habrá más de 1.000 despidos no sometidos a convenio. Ya hay listas negras circulando por el Distrito C. El ERE no va a ser voluntario.
Ni va a ser igualitario, ese millar de personas, si no son más, están fuera de convenio, por lo que pueden ser despedidas en cualquier condición. Además, los de innovación, supuesto pilar de la compañía, suelen ser nuevas adquisiciones, que no llevan, ni mucho menos, el tiempo necesario para acogerse al ERE.
Y a todo esto, los sindicatos, calladitos. ¿No será que Murtra está echando a españoles para subcontratar a indios y colombianos? Por de pronto han abierto un 'call center' en Colombia
Por cierto, la seguridad social de los que estén fuera de convenio no lo pagará la compañía sino todos los españoles, a escote.
Por cierto, ¿más de la tercera parte de la plantilla de Telefónica estaba cruzada de brazos?
Y a todo esto los sindicatos, calladitos. ¿No será que Murtra está echando a españoles para subcontratar a indios (de la India) y colombianos? Por de pronto, han abierto un 'call center' en Colombia.
El mal gestor se dedica a reducir gastos, el buen gestor se preocupa por aumentar los ingresos
Murtra miente: el ERE es mucho peor de lo que parece... porque la situación es más desesperada de lo que parece. En cualquier caso, el mal gestor se dedica a reducir gastos, el buen gestor se preocupa por aumentar los ingresos.
Y Pedro Sánchez, máximo accionista de Telefónica, exhibe la fuerza del Ejecutivo con una política empresarial concretada en más de 6.000 despidos: muy meritorio.











