Llevamos semanas viviendo un tarifazo eléctrico, encadenando un récord tras otro (el último, por ahora, será el del próximo viernes, cuando alcance los 152 euros por megavatio-hora), pero el Gobierno no reduce con firmeza los impuestos. Y un pequeño traspiés más: el Departamento que dirige Teresa Ribera ha retrasado la próxima subasta renovable, justo un día después de que EiDF Solar y Ric Energy dijeran que este mecanismo no afectará al precio.

En concreto, se subastarán 3.300 megavatios (MW) eólicos y fotovoltaicos el próximo 19 de octubre, cinco días después de lo anunciado en un principio. De estos, 600 MW tendrán que estar operativos en ocho meses para adelantar el ahorro, según el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, que considera que la incorporación de generación renovable resultante de dicha subasta “reducirá directamente el precio de la electricidad, al desplazar energía producida con centrales más caras y contaminantes”. Además, habrá 300 MW para pequeñas instalaciones fotovoltaicas con fuerte carácter local.

El CEO de EiDF Solar, Fernando Romero, subrayó que “la subasta no va solucionar nada a corto plazo”, porque “a dos años vista las renovables somos una parte pequeña en el mercado eléctrico y no marcamos precio, aunque en diez años seremos representativos”

El pasado martes, en el VI Foro de Energía organizado por El Economista, el CEO de EiDF Solar, Fernando Romero, subrayó que “la subasta no va solucionar nada a corto plazo”, porque “a dos años vista las renovables somos una parte pequeña en el mercado eléctrico y no marcamos precio, aunque en diez años seremos representativos”. Por su parte, José Luis Moya Jiménez, CEO de Ric Energy Group, refirió que “las subastas de renovables no van a afectar al precio del consumidor”.

Romero también aludió a que “la tramitación es el problema principal”: “Hay un problema subyacente que son los permisos”, añadiendo que “hay un tema muy importante de cómo se está regulando y cómo se debería regular”. En esta misma línea, Manuel García, CEO de Greenalia, señaló que “estamos intentando reducir precios con subastas, pero el problema son los proyectos” y se preguntó “¿de qué valen las subastas si a día de hoy no sabemos si podemos llevar proyectos a esas subastas y si se pueden cumplir los plazos?”.

Ribera no sabe muy bien qué hacer, mientras sigue sin reducir con firmeza los impuestos de la luz: tras la rebaja del IVA del 21% al 10% y la suspensión del impuesto del 7% a la generación, baraja reducir al mínimo el impuesto especial del 5% 

Por su parte, en el citado Foro, Juanjo Sánchez, CEO de Capital Energy, defendió la subasta como “una herramienta que nos tiene que llevar a un modelo energético más competitivo”. Eso sí, María Luisa Huidobro, CEO de Villar Mir Energía, señaló que la subasta debe ser un método “complementario y no la única propuesta” para impulsar las renovables y la transición. Y Arancha Martínez, country manager de X-Elio en España, añadió que “las subastas sí ayudan a reducir el precio de la energía”. Además, este jueves, la Unión Española Fotovoltaica (UNEF) ha señalado que es necesario acelerar el calendario de subastas y revisar al alza los objetivos del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) para lograr un mayor impulso de la energía fotovoltaica que contribuya a reducir la subida y volatilidad de los precios de la luz.

Claro que esto último tiene poco efecto ante el tarifazo eléctrico que vivimos actualmente y que se debe al mercado internacional, concretamente a los altos precios del gas y de los derechos de emisión de CO2. Eso sí, Ribera no sabe muy bien qué hacer, mientras sigue sin reducir con firmeza los impuestos de la luz, que representan cerca del 60% de la factura. Y es que la rebaja del IVA del 21% al 10% y la suspensión del impuesto del 7% a la generación no se han notado ante tanto récord y ahora se baraja reducir al mínimo el impuesto especial del 5% sobre la luz.