El ingeniero bilbaíno José Antonio Jainaga (Sidenor), interesado en entrar en Talgo... como socio industrial ha recibido el rechazo a su primera oferta por parte del fondo Trilantic
Hace unas semanas, decíamos que Talgo podía morir de éxito, porque con pedidos en niveles récord, desde el veto del Gobierno Sánchez a la OPA del consorcio húngaro Ganz-Mavag y su posterior retirada, la cotización bajaba un 18%. Pero este martes, vive una ligera alegría en el parqué, donde sube un 4,52%, pues los inversores han aplaudido el interés del empresario vasco José Antonio Jainaga Gómez, presidente de Sidenor, en entrar como socio industrial del fabricante ferroviario.
Jainaga Gómez es un ingeniero industrial bilbaíno de 70 años que ocupa el puesto 153 en el ranking ‘Los más ricos de 2024 en España’ que elabora El Mundo y el décimo si sólo se tienen en cuenta las fortunas del País Vasco. A lo largo de su trayectoria, ha trabajado en Sener, Michelin y Sidenor. Precisamente en esta última empresa de la industria siderúrgica fue nombrado CEO en 2005, y ese mismo año, el expolítico y empresario vasco Sabino Arrieta la vendió a la acerera brasileña Gerdau por 444,8 millones de euros, todo un pelotazo si se tiene en cuenta que la había adquirido 10 años antes por 13 millones. Más tarde, en 2016, Jainaga creó su sociedad familiar (Clerbil) y junto a otros directivos de Sidenor procedió a comprar dicha compañía a Gerdau por 155 millones y a poner en marcha el fondo de inversión Mirai. Desde entonces, se ha ido creando un grupo industrial a través de la fusión de compañías.
En 2016, siendo CEO de Sidenor, Jainaga, junto a otros directivos, procedió a comprar la compañía siderúrgica vasca que había sido vendida a la brasileña Gerdau en 2005
Es cierto que dentro del sector siderúrgico no todos los planes del ingeniero bilbaíno han salido bien: pretendió unir a las acereras Tubacex, Tubos Reunidos y Olarra, pero no lo logró; y puso sus ojos en Celsa, la acerera catalana de la familia Rubiralta, aunque sin éxito y viendo cómo esta acababa finalmente en manos de fondos de inversión. Ahora Jainaga parece que ha decidido mirar hacia otros sectores, como el ferroviario, pues está evaluando su entrada como socio industrial en Talgo.
El Gobierno vasco respalda la posible entrada de Jainaga en el fabricante ferroviario, según han adelantado El Correo y El Economista. Una operación que se haría a través de la corporación Mirai Investments, que compraría las acciones de Trilantic, el fondo británico que quiere salir sí o sí del capital de Talgo, donde entró en 2006, y para ello estaría dispuesto a romper el pacto que tiene con la familia Oriol y la familia Abelló. Recuerden que los tres controlan el 40% de Talgo a través de la sociedad Pegaso Transportation International, que es propiedad en un 63% de Trilantic, en un 20,3% de la familia fundadora, la familia Oriol; y en un 7,5% de Torreal -la familia Abelló-. De esta forma, en solitario, Trilantic es dueño de una participación inferior al 30% de Talgo; unos 40 miembros de la familia Oriol poseen algo más de un 7% y los Abelló tienen un 3%.
La búsqueda de un socio industrial para Talgo no es baladí en el País Vasco, en especial por la planta situada en Rivabellosa (Álava), que emplea a cerca de 700 trabajadores directos, dentro de los casi 2.500 que tiene en España
La búsqueda de un socio industrial para Talgo no es baladí en el País Vasco, en especial por la planta situada en Rivabellosa (Álava), que emplea a cerca de 700 trabajadores directos, dentro de los casi 2.500 que tiene en España. Y no un socio cualquiera, sino que permita impulsar un proyecto de inversiones que garanticen la continuidad de la compañía y afrontar los pedidos. La portavoz del Gobierno vasco, María Ubarretxena, ha subrayado que debe haber “un socio industrial con un plan sólido y de futuro, y en caso de ser así, dicho Ejecutivo “analizará y acompañará”, pues está y estará “a favor de la industria en Euskadi y a favor del empleo en Euskadi”. Por su parte, el diputado general de Álava, Ramiro González, ha pedido “discreción” ante la posible entrada de Jainaga en Talgo, porque considera que “el éxito de estas operaciones radica en la discreción con la que se lleven”.
A la vista de todo esto parece que la búsqueda de un socio industrial va mejor en el País Vasco que por parte del Gobierno Sánchez. Recuerden que este último llegó a buscar a la matriz del fabricante de trenes checo Skoda (PPF Group, que es propiedad de Renáta Kellnerová -la mujer más rica de República Checa y la cuarta mujer más rica de Europa- y su familia ) para que pusiera dinero... y así forzar a Criteria Caixa a entrar en Talgo. Ya saben que el holding inversor que preside Isidro Fainé y que tiene como CEO a Ángel Simón había puesto bastante resistencia inicial a la petición de Sánchez porque no conocen el sector ferroviario, pero a principios del mes pasado, dicha resitencia se había suavizado un poco y se hablaba de que podrían contemplar una entrada en el capital de Talgo, siempre y cuando hubiera un socio industrial. Además, el Gobierno Sánchez tampoco logró un sí de otras empresas (CAF, Stadler o Escribano, entre otras), a entrar en Talgo.