Ha comenzado la campaña del IRPF. Este año 2024 coincide la subida de cotizaciones sociales para los autónomos de tipo medio, es decir, de clase media, que son la inmensa mayoría. A partir de ahora, todos tendrán que declarar, aunque reciban menos de 23.000 euros de un sólo pagador o menos de 15.000 euros de varios pagadores.
Todo ello enmarcado dentro de una subida generalizada de las cuotas sociales. Es un Sanchismo obsesionado con los autónomos, que ha conseguido que el número de funcionarios públicos, iguale y tienda a superar a los autónomos, es decir, a ese punto intermedio entre empresarios y trabajadores que es el autónomo, el hombre más libre que existe, jefe de sí mismo y que renuncia a las subvención pública para no depender del Estado. Por renunciar, renuncia también a una pensión digna y pobre de él si se pone enfermo. Lo dicho: el ciudadano más libre es el trabajador autónomo, el profesional que se crea su propia máquina de facturar, el que no busca un empleo sino un trabajo.
Subida de cuotas, supresión de los mínimos de renta para no tener que declarar... toda una ofensiva general contra profesionales y autónomos y contra el pleno empleo
Una dirigente de Sumar aseguraba que la reducción paulatina del número de autónomos en España es una buena noticia porque eso significa que así se está terminando con los falsos autónomos. ¡Toma ya!
Este es el espíritu del Sanchismo: liquidar al trabajo autónomo. Al profesional, al autoempleador, al autónomo se les puede controlar mucho menos que al asalariado y no puede perseguírsele como hace con el empresario: resulta muy molesto.
A ver si nos entendemos: el autónomo español surge como respuesta a los elevadísimos impuestos por cuotas que se exige a cualquiera que cree un puesto de trabajo. Recuerden, que el 82% de la cuotas las paga la empresa y el 18% restante el trabajador... aunque el 100 por 100 sale de la misma bolsa: de la empresa.
Además, si contamos todos los impuestos que paga un trabajador y, atención, lo que no se ve, los impuestos que paga por él la empresa de la que cobra su sueldo... ¡el Estado se lleva la mitad del conjunto!
No hay otro remedio: hay que empezar a pagar las pensiones con IVA. Porque la caja sin fondos es esa: los 12.500 millones de euros, por 14 pagas, que cuesta pagar las pensiones de una sociedad envejecida y sin hijos
No es de extrañar que toda empresa, sobre todo la pequeña empresa, se resista a contratar a un trabajador y que los salarios en España sean bajos. Es la única defensa del emprendedor frente a una Hacienda depredadora.
Al fondo, el impagable coste de la jubilación, razón de este ataque general contra el trabajador autónomo. No hay otro remedio: hay que empezar a pagar las pensiones con IVA. Porque la caja sin fondo es esa: los 12.600 millones de euros mensuales, por 14 pagas, que cuesta pagar las pensiones de una sociedad envejecida y egoísta, es decir, sin hijos.
José Luis Escrivá, Yolanda Díaz y María Jesús Montero, constituyen un desastre. no ya para la economía española, sino para la sociedad española, que es peor, porque al Sanchismo le molesta el hombre libre.