Josep Oliu (72 años) dejó de ser presidente ejecutivo del Sabadell en marzo de 2021 tras el nombramiento de César González-Bueno como CEO, en sustitución de Jaime Guardiola. Oliu dejaba atrás 22 años como primer ejecutivo de la entidad de la que es consejero desde el año 1990.

Es decir, toda una vida en primera línea ejecutiva que, cuando llegó el momento, no fue fácil abandonar en manos del nuevo CEO. El tira y afloja tuvo su punto álgido cuando González-Bueno le dio un ultimátum: o tengo todo el poder ejecutivo o dimito. Y Oliu cedió.

Ahora, el presidente será reelegido -primero en la Junta del 23 de marzo como consejero externo y luego en el Consejo como presidente- para otros cuatro años, con el regulador totalmente a favor. En Fráncfort valoran enormemente el hecho de que el Sabadell ha sido el primer banco español que ha adoptado, después de años, el modelo chairman de gobierno corporativo. Los accionistas, por su parte, no pueden estar más satisfechos tras los dos últimos años: el ‘pay out’ ha pasado de cero euros a 0,30 céntimos primero y luego a 0,50 céntimos… y con previsión de seguir subiendo. Además, el valor bursátil del banco ha pasado de algo menos de 2.000 millones de 2020 a los 6.700 millones actuales.

Pero lo más importante: Oliu va a tener por delante otros cuatro años para buscar una fusión con la que poner fin a su larga trayectoria como banquero. Conviene tener en cuenta, además, que en una fusión el protagonismo lo tiene la propiedad, es decir, decide el Consejo de Administración que él preside y no el equipo directivo con el CEO a la cabeza.

Y atención, porque se podría reeditar el intento de fusión con el BBVA, aunque las tornas han cambiado radicalmente desde noviembre de 2020. Entonces era Oliu quien buscaba una tabla de salvación para el Sabadell, mientras que ahora es Carlos Torres quien busca una salida a su problema de reputación corporativa derivada del caso Villarejo, incluido el relevo de Onur Genç. Recuerden que fue el turco el que más se opuso a la fusión con el Sabadell, algo que ahora le reprochan por el giro que ha dado la entidad catalana con sede en Alicante.

Por cierto, además de la reelección de Oliu, la Junta ratificará el nombramiento de Pedro Viñolas Serra, actual CEO de Colonial, como consejero independiente en sustitución de Anthony Frank Elliott, que este lunes ha presentado su dimisión como consejero, salida que se hará efectiva tras la Junta.