Lo cuenta el diario peruano La República. El presidente del Consejo de ministros, Aníbal Torres, acompañado del director de la Agencia Tributaria peruana, se reunión el pasado viernes con representantes de Telefónica en Lima.

El diario peruano especifica quiénes fueron los miembros de la dirección de Telefónica que acudieron a tan importante negociación: Pablo de Carvajal, secretario general Telefónica; Alfonso Gómez Palacio, CEO de Telefónica Hispanoamérica (Hispam), Francisco Javier de Paz Mancho, vocal del Consejo de Administración de Telefónica y Jaume Roures... "asesor de un subgrupo de accionistas de la firma española".

Lo de Carvajal es lógico, es el jefe jurídico de la compañía y, por tanto, responsable último de un conflicto que se eterniza en los tribunales peruanos y, ojo, también en el CIADI. 

Su presencia no ayuda a la despolitización de la compañía que persigue el presidente Pallete

Más: la presencia de Alfonso Gómez, primer ejecutivo de Telefónica Hispanoamérica (Hispam) también es del todo lógica. Es su división. 

Más problemas hay para aceptar la presencia en la reunión de Javier de Paz, consejero externo de Telefónica pero con mas atribuciones en la compañía de las correspondientes a su cargo. Pero, al menos, trabaja en la operadora, aunque su verdadero cometido sea representar a los intereses del PSOE en Telefónica. En cualquier caso, es consejero.

Ahora bien, lo que ya no tiene explicación alguna es la presencia, como representante de Telefónica, del hombre de Mediapro, el "comunista y anticlerical" Jaume Roures. ¿Qué pinta Roures allí? ¿Acaso es directivo de la operadora, quizás consejero? Alguien, para justificar su presencia, le sopló a La República que Roures representaba a "un subgrupo de accionistas de la firma española". En efecto, debe tratarse de un subgrupo muy sub, pero, en cualquier caso, los subgrupos no representan a una multinacional que está negociando un importante conflicto. 

Eso, por no recordar las buenas relaciones que el consejero Javier de Paz siempre ha mantenido con Jaume Roures. Eso sí, no se puede comparar: el uno es socialista y el otro comunista. Es muy distinto.     

Y eso que el presidente, Álvarez Pallete, lleva un lustro intentando despolitizar la compañía, y su casi salida total de PRISA ya ha dado buenos resultados en ese sentido. 

Y a todo esto, según fuentes de Telefónica Hispam, los resultados de la reunión fueron pobres. No habrá pacto sino que seguirá la espera a los pronunciamientos de los tribunales.

Porque en la reunión se trataba de llegar a un acuerdo extrajudicial, al que ya ha aludido el presidente peruano Pedro Castillo, sobre el conflicto fiscal que Telefónica mantiene desde hace lustros con la poderosa agencia tributaria peruana, SUNAT.

Mediapro ha hecho perder muchos millones de euros a Telefónica con los derechos del fútbol... y ahora resulta que Roures representa a un "subgrupo de accionistas". ¡Qué cosas!

Conste que en un principio la deuda era mínima y por supuesto, incluso por una cuestión menor. De hecho, la operadora española niega que tal deuda exista. Ahora bien, la peculiaridad de la normativa peruana consiste en los intereses de demora, que pueden superar la barbaridad del 20% anual. Así que, aquella pequeña deuda ha crecido, no se sabe hasta cuánto, porque depende de las decisiones judiciales. Y si la cosa acaba en el CIADI, que ya está en él, lo que ocurre es que es aún más lento que los tribunales... entones mejor no hablar.

Es decir, un caso realmente difícil que incluso dificulta que Telefónica se marche de Perú porque nadie quiere comprar con una incertidumbre de este calibre... que todos saben artificialmente inflada pero a la que nadie quiere arriesgarse.

Pero no se apuren, estando Jaume Roures por medio todo se va a arreglar. Como ocurrió con los derechos del fútbol. Derechos, en los que, por cierto, Roures ha hecho perder mucho dinero a Telefónica, hasta el punto de que la operadora se cansó, decidió tirar las patas por alto y hacerse directamente con el control de los derechos de retransmisión del fútbol. De esta forma se quitaba de en medio al peligros depredador Roures. ¿Y ahora resulta que Roures representa a Telefónica ante el gobierno peruano? ¿Quién le invitó?