La noticia es que el tandem formado por Amber Capital (Joseph Oughourlian) y La Moncloa (representada por Miguel 'Cubanino' Barroso) ha ofrecido al banco de Santander que vuelva a invertir en el Grupo Prisa, donde actualmente continúa poseyendo un 4% del capital, además del riesgo crediticio asumido por la editora. Justo en el momento en que los franceses de Vivendi han dejado de ser la opción deseada por Pedro Sánchez para hacerse con el control de Prisa. Al parecer, ya no son tan amigos.

Y todo ello justo en el momento, también, en que la influencia de César Alierta en Amber Capital, propietario del 29,9% de las acciones de Prisa, está en franca decadencia.

Recuerden las dos últimas etapas de El País, La Ser y compañía, tras la caída de Juan Luis Cebrián. En la primera de ellas mandaba Ana Botín, a través de Javier Monzón, presidente de El País. En la segunda, que sigue siendo la actual, Oughourlian se hace con la Presidencia y 'Cubanino' Barroso toma el mando ideológico en nombre del Sanchismo. 

El País y La Ser se han convertido en un mero aparatado de propaganda de Moncloa

En el entretanto, Telefónica, propietaria del 9% de Prisa, se niega a aportar más dinero. Nada de extrañar, dado que Oughourlian sabe que necesita, con urgencia, una ampliación de capital... en una empresa donde todo el mundo quiere mandar y nadie aportar, dado que todo el mundo sabe que está en quiebra técnica y que cada día es menos independiente: El País y La Ser se han convertido en un mero aparato de propaganda de Moncloa. 

En cualquier caso, Ana Botín tiene claro que no va a poner más dinero si no manda, y para ello exige plenas garantías de que no se le va a volver a echar del mando como ya hicieran en la anterior ocasión. 

El gran problema de todo este miriñaque en que se ha convertido el accionariado de Prisa es saber quién es Amber Capital. No sólo quién es sino a quién obedece, quién es el dueño real de un fondo activista y desestabilizador que se supone responde a capital armenio afincado en Occidente, pero del que no sabemos nada más... Y eso es muy poco. 

¿A quién reporta Oughourlian? Cuando sepamos eso, también sabremos qué va a pasar con el periódico más vendido de España y con la cadena de emisoras de radio más escuchada.