La actualización este lunes de la lista Forbes de los más ricos de España nos deja una novedad en el top 5: Juan Carlos Escotet, dueño y presidente de Abanca, escala una posición, hasta la cuarta, en detrimento de Juan Roig, presidente de Mercadona, que baja una posición.

Así, los tres más acaudalados siguen siendo Amancio Ortega, cuya fortuna ha aumentado en 28.300 millones, hasta 81.800 millones de euros, seguido de su hija Sandra Ortega, (7.100 millones tras sumar 1.700 millones más) y de Rafael del Pino, cuya fortuna, tras aumentar en 2.100 millones, alcanza los 5.900 millones de euros.

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Vamos con Escotet, sin duda, uno de los protagonistas, no tanto por su patrimonio, que alcanza los 4.000 millones, tras aumentarlo en 800 en doce meses, sino por el hecho de que hace tan sólo tres años, en 2020, ni siquiera aparecía entre los 50 primeros de la lista. La primera vez que apareció en este exclusivo club fue en 2021, y lo hizo directamente en el ‘top 5’ con una fortuna de 2.700 millones. Ya entonces se erigió como el primer banquero del ranking.

Su ascenso ha sido meteórico y lo mejor de todo es su punto de partida: la adquisición de NCG Banco -las antiguas cajas gallegas- al FROB por 1.003 millones de euros. No era la mejor opción, ni por la cantidad de dinero ni por las condiciones, pero al final se llevó el gato al agua gracias a la inestimable colaboración de su 'paisano', el entonces presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo. El actual líder del PP se negó en rotundo a que las antiguas cajas gallegas acabaran en manos de los catalanes de Caixabank, presididos entonces por el manresano Isidro Fainé, tal y como pretendía el entonces ministro de Economía, Luis de Guindos.

En otras palabras, Escotet comenzó a labrar su fortuna 'española-forbiana' tras la compra de NCG Banco, pagado -por cierto, con retrasos- con dinero de la propia entidad, que previamente había sido rescatada con 9.000 millones de ayudas públicas, después de traspasar activos tóxicos a la SAREB por valor de otros 5.000 millones. Es decir, Escotet compró las antiguas cajas gallegas... con dinero de todos los españoles. “Hay que saber comprar”, afirmó el banquero nacido en Madrid y de raíces hispano-venezolanas en unas jornadas organizadas por el IESE en mayo de este año. Tiene toda la razón.