“Nada ha empeorado en los fundamentales de la entidad"
Uno de los problemas que tiene presentar resultados un viernes de agosto es que el departamento de comunicación tiene prisa por largarse y al final hace cualquier cosa, por decir algo. Aún así, la nota de prensa que nos presenta el Grupo Cajamar no está mal. Lo que no es muy de recibo es el informe financiero, que comienza con un resumen resumido de la coyuntura económica actual, pero no actualiza los datos a la fecha de emisión del mismo ni sabemos muy bien qué aporta. Total, para repetirnos lo que ha dicho el Banco de España, no necesitamos leer a Cajamar. El informe resulta algo desordenado y al final olvida presentarnos un balance, cosa que siempre gusta ver.
Pero es que los resultados no han sido buenos en Cajamar y ya no saben cómo explicarlo. En el primer semestre de 2022 el resultado consolidado del grupo ha caído un 12,3% hasta los 50,1 millones de euros, frente a los 57,1 millones de euros que se obtuvieron en el primer semestre de 2021.
Está claro que Cajamar confía en que la recuperación del margen de intereses como consecuencia de la subida de tipos (el Euribor a 12 meses ha subido un 1,5% en lo que va de año) le vaya ayudando. De hecho, aunque el margen de intereses que nos presenta al cierre del primer semestre es inferior al de 2021 (-8,7%), el del segundo trimestre de este año es el mejor desde los mínimos trimestrales que se registraron en el cuarto trimestre de 2021 (+9,7%). Vamos, que la subida del Euribor a la que aludíamos se va notando y con la aceleración que ha tomado en los últimos tres meses, se notará aún más de aquí a fin de año, según vayan renovándose las operaciones de activo a los nuevos tipos. De hecho, la entidad presume de una estructura de plazos de vencimientos y renovaciones orientada a recoger estas subidas.
El margen bruto es difícil de analizar a veces en este grupo, que lleva varios trimestres generando, de vez en cuando, resultados por venta o valoración de sus activos y pasivos que inciden en los márgenes de los trimestres en que se producen. Es decir, la comparabilidad intertrimestral se hace difícil. Sin embargo, una vez descontados los efectos de este tipo de resultados, parece que el margen está aumentando como consecuencia de un fuerte crecimiento de los ingresos por comisiones (+23,1% si comparamos los segundos trimestres de 2021 y 2022).
El crecimiento de las comisiones posiblemente se pare, e incluso pase a ser decrecimiento, si los márgenes de intereses aumentan. Por otro lado, el recurso a los resultados por venta o valoración, que han salvado este semestre (120 millones de euros para un resultado de 50 millones de euros) y salvaron el mismo del año pasado (470 millones de euros para un resultado de 57 millones de euros) pueden estar tocando a su fin puesto que uno de los efectos de las subidas de tipos es la pérdida de valor de los activos. Y si no que se lo digan al Banco de España, cuya cartera se desvalorizó en 19.000 millones en 2021 con la pequeña subida de aquel año. Ya veremos este.
En cualquier caso, el margen bruto publicado ha caído un 37,1%, si volvemos a comparar los primeros semestres de 2021 y 2022, o un 1,9% si comparamos los segundos trimestres de 2021 y 2022. Esta segunda medida puede darnos mejor idea de lo que está pasando, en un grupo que presenta mucha volatilidad en sus resultados contables.
Todas las medidas de calidad de los activos (activos irregulares, morosidad, cobertura…) han mejorado mucho: esperamos que la entidad no haya sido muy optimista en esta materia y que los incrementos de morosidad que esperamos, como consecuencia de la situación económica que se avecina, no le hagan reconsiderar mucho lo que ha registrado en esta materia este semestre
La morosidad va mejorando, como en todo el sector, pero aquí de manera muy acusada, lo que ha ido permitiendo aliviar la cuenta de resultados. Las pérdidas por este concepto se han reducido a la mitad en estos primeros seis meses de 2022. Todas las medidas de calidad de los activos (activos irregulares, morosidad, cobertura…) han mejorado mucho: esperamos que la entidad no haya sido muy optimista en esta materia y que los incrementos de morosidad que esperamos, como consecuencia de la situación económica que se avecina, no le hagan reconsiderar mucho lo que ha registrado en esta materia este semestre.
La entidad no presenta mal coeficiente de solvencia (15,65%) aunque sí preocupa que haya perdido 40 pbs. en esta medida en los últimos doce meses o que la rentabilidad de sus recursos propios continúe cayendo (2,78% frente a 3,35% hace un año), como lo hace la de su activo (0,41% frente a 0,49% hace un año).
Las ratios de liquidez son adecuadas, pero ya saben que sirven para poco cuando las autoridades no quieren colaborar. Y si no, que se lo digan al Popular hace cinco años.
En resumen, los resultados de Cajamar producen siempre desazón. Demasiado volátiles y dependientes de beneficios no recurrentes. El margen de intereses y el bruto (excepción hecha de los resultados por venta o valoración de activos) resulta muy exiguo a pesar de su mejora. A la vista de lo que puede venirse, le deseamos suerte.