La Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) ha presentado su tercer observatorio trimestral sobre el mercado de trabajo, y ha aprovechado la ocasión para lanzar una crítica por la falta de transparencia en los datos de empleo correspondientes al mes de octubre. “No puede ser que nuestro trabajo sea hacer de detectives para averiguar cómo se han contabilizado los datos”, ha denunciado Marcel Jansen.

Recuerden que en los datos presentados por el Ministerio de Trabajo y por el de Seguridad Social se anunció una caída del paro en 27.000, algo que en Hispanidad analizamos: el 54.25% de los contratos firmados en octubre eran temporales y de los fijos, el 62,17%, eran fijos discontinuos o a tiempo parcial, es decir, precarios. En Fedea les parece rara esta mejora del empleo puesto que se trata de un periodo históricamente malo. 

Desde Fedea alertan de una alteración en el cómputo de los demandantes de empleo, así como de los fijos discontinuos. Por ejemplo, se quejan de la imposibilidad de acceder a los metadatos, datos más específicos, de las estadísticas del SEPE. Algo que les imposibilita evaluar los efectos de la reforma laboral.

“Los contratos fijos discontinuos que tenemos hoy no son los de antes de la reforma, por lo que si no se explica cómo se están contabilizando se genera un ruido en las estadísticas que dificulta poder hacer una evaluación rigurosa de los efectos del nuevo marco laboral”, ha apuntado Florentino Felgueroso, investigador asociado de Fedea.

“Llevamos tres años con mucho ruido en la estadística, y ahora se ha focalizado en la caída del paro en octubre. Interpretamos que se ha podido producir un ajuste en el número de demandantes de empleo, que no ha sido explicado, y que no sabemos si es puntual, o si volverá a producirse en los siguientes meses”, continuaba Felgueroso

“Necesitamos más transparencia, mejoras en los datos y su adaptación a la nueva realidad laboral del momento”, ha sentenciado Jansen.