Empieza un nuevo mes y como, tristemente, viene siendo habitual, vuelve a quedar patente la crisis profunda del automóvil en España, y ojo, porque el sector aporta el 11% del PIB de nuestro país. Hasta noviembre se han vendido 739.221 turismos y todoterrenos, un 4,4% menos que en el mismo periodo de 2021 y un 35,8% menos que hace tres años (1.152.419 unidades), antes del Covid, según datos de la Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac). Y esa diferencia del 35,8% se traduce en nada más y nada menos que 412.950 unidades.

La incertidumbre económica, la inflación, la crisis de chips, el fuerte encarecimiento del precio de los combustibles y los cuellos de botella en el aprovisionamiento de coches son las principales razones de dicha crisis. Ante el dato acumulado, que se mantiene lejos de los niveles preCovid, queda en un segundo plano el mensual: 73.221 coches vendidos en noviembre, un 10,3% más que hace un año y encadenando cuatro subidas mensuales consecutivas, pero son 19.937 menos que hace tres años (93.158).

Desde Faconauto consideran que “sólo una mejora del aprovisionamiento del stock de concesionarios y un cambio de tendencia en el precio de la gasolina puede empezar a aliviar un mercado que encara 2023 con mucha incertidumbre”

El sector no se prevé mejora hasta 2023... o más allá: hace unos días, el director general de la marca checa Škoda (propiedad del grupo Volkswagen) en nuestro país, Fidel Jiménez de Parga, ha avisado que “2023 no será el año en el que España se vuelva al millón de coches vendidos”. Félix García, director de comunicación y marketing de Anfac, ha explicado que el “dato positivo” de noviembre “indica que el año puede terminar en torno a las 820.000 nuevas unidades vendidas”, por debajo de los datos de 2021 y lejos de los prepandemia, cuando se necesita “seguir avanzando en coches de bajas y cero emisiones para reducir la elevada edad del parque”.

Por su parte, desde Faconauto (patronal de las asociaciones de concesionarios oficiales), su director de comunicación, Raúl Morales, ha destacado que las ventas de noviembre “confirman el peor escenario para el cierre de este ejercicio, que rondará con suerte las 820.000 unidades vendidas, algo que nos retrotrae a la crisis de 2008”, y ha considerado que sólo una mejora del aprovisionamiento del stock de concesionarios y un cambio de tendencia en el precio de la gasolina puede empezar a aliviar un mercado que encara 2023 con mucha incertidumbre”. Tania Puche, directora de comunicación de la Asociación de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y Recambios (Ganvam), ha añadido que este año no ha habido impacto del Black Friday porque “las redes de distribución no están en disposición de jugar la baza de los descuentos en un momento en el que la falta de stock y la subida de los costes energéticos y de materias primas presiona al alza el precio medio de los vehículos”.

Por marcas, continúan las malas noticias, porque prosigue la colonización asiática: Toyota, Kia y Hyundai se mantienen como las más vendidas en los once primeros meses, pero ninguna produce en España excepto, y de forma mínima, la primera

Por marcas de turismos, continúan las malas noticias, porque prosigue la colonización asiática. Las marcas Toyota, Kia y Hyundai se mantienen como las más vendidas en los once primeros meses, pero ninguna produce en España excepto, y muy poco, la primera (fabrica la furgoneta Proace City en la planta que el grupo Stellantis tiene en Vigo). Toyota, Kia y Hyundai han desplazado a grandes marcas europeas (Volkswagen, Peugeot, Seat, Renault, Citroën, Mercedes y Dacia) en el ranking de las diez más vendidas, las cuales sí fabrican a gran escala en nuestro país y generan decenas de miles de empleos. 

Paralelamente, Anfac ha referido que las matriculaciones de vehículos comerciales ligeros han caído un 23,9%, a 107.322 unidades, en los once primeros meses. Mientras las de vehículos industriales y autobuses han crecido un 12,3%, a 23.662 unidades. Por su parte, las de vehículos alternativos (electrificados, híbridos y de gas) han crecido un 12,5%, a 311.273 hasta noviembre: 75.864 unidades (+22,3%) de electrificados (100% eléctricos e híbridos enchufables -con una batería grande que se recarga por el motor de combustión y también mediante un enchufe-), concretamente 32.312 (+37,1%) de 100% eléctricos puros y 43.552 (+13,2%) de híbridos enchufables; 14.838 (-9,5%) de gas; y 220.561 (+11,3%) híbridos convencionales o no enchufables -tienen una pequeña batería que se recarga por el motor-, que siguen siendo los preferidos y ya representan una cuota de mercado del 25,25%.