Contratar es cada vez más caro y más difícil, y ahora no lo decimos nosotros, sino que lo demuesta el Índice de Coste Laboral Armonizado publicado este martes por el Instituto Nacional de Estadística (INE). ¿El motivo? La subida, y ya van 17 trimestres consecutivos, de los costes laborales, que registraron un incremento del 2,1%, en el tercer trimestre de 2025. Por componentes, el coste salarial se incrementó en el tercer trimestre un 2% en relación al mismo trimestre de 2024, en tanto que los otros costes subieron un 2,5%. El coste laboral, excluyendo pagos extraordinarios y atrasos, creció un 2,3% interanual entre julio y septiembre de este año.

Eliminando los efectos estacionales y de calendario, el coste laboral por hora trabajada avanzó un 2,4% en el tercer trimestre de 2025 en relación al mismo periodo de 2024, tasa 1,2 inferior a la del trimestre previo. En tasa trimestral (tercer trimestre sobre segundo trimestre), el coste laboral por hora trabajada aumentó un 0,4% en la serie corregida de efectos estacionales y de calendario, tasa siete décimas inferior a la del trimestre anterior. Con esta subida también se acumulan ya 17 trimestres de alzas trimestrales.

Cada vez es más difícil contratar, las cuotas sociales, que son el mayor lastre de la creación de empleo no dejan de subir, todo ello teniendo en cuenta que seguimos siendo el país con más desempleo de la UE y la OCDE.  A lo que hay que sumar los siguientes objetivos de Yolanda: encarecer el despido, subir el SMI con su correspondiente aumento de las cotizaciones sociales y reducir la jornada laboral. Es decir, poner más trabas a la creación de empleo y hacer más caro, aún más, el coste laboral. Sin perder de vista que España está sumida en la vagancia, con el absentismo por las nubes. 

¿Y sin probamos a cargarnos las cotizaciones? Sobre todo en los salarios más bajos.