Primer local en Gran Vía (imagen izquierda), presentado como la revolución del comercio. Aún no ha abierto el anunciado segundo local, en Serrano 52, local alquilado por Dimas Gimeno y que en su día acogió un centro de El Corte Inglés
El Corte Inglés (ECI) ha abonado, con fecha 11 de abril, a Dimas Gimeno y a su madre, María Antonia Álvarez, hermana de Isidoro Álvarez, los últimos 30 millones de euros que les adeudaban por la participación de ambos en Inversiones Isidoro Álvarez SA (IASA). Con ello, los Álvarez dejan de tener una sola acción de El Corte Inglés, ahora controlado por las primas de Dimas, Marta y Cristina Álvarez Guil, convertidas en las primeras accionistas personales de ECI, del que controlan un 22%, sólo superadas por el primer accionista (38%), que es la fundación Ramón Areces.
Recuerden: madre e hijo, María Antonia Álvarez y Dimas Gimeno, vendieron su participación en IASA por 145 millones de euros (Dimas empezó pidiendo 500 millones) su 22% de IASA, en tres plazos. En 2021, Marta y Cristina les abonaron un primer plazo de 85 millones de euros, absolutamente para satisfacer la deuda creada con el fisco y con la banca. En 2022 fueron 30 millones de euros y el último plazo, el ahora satisfecho, por valor de otros 30 millones, según fuentes próximas al propio Dimas, ya comprometidos por la deuda asumida con el lanzamiento de WOW... que encima no funciona.
Recuerden: primer local en Gran Vía, presentado como la revolución del comercio. Aún no ha abierto el anunciado segundo local, en Serrano 52, local alquilado por Dimas Gimeno y que en su día acogió un centro de El Corte Inglés. Este segundo local, según las mismas fuentes, no parece que vaya a abrirse de inmediato.
Porque lo cierto es que el revolucionario modelo WOW, mezcla de venta presencial y digital, es un desastre. En la propia WOW admiten, un año largo después de su inauguración, que las ventas están bajo mínimos.
Y más: el propio Dimas Gimeno ha hecho saber que iniciará una segunda ronda de financiación, ¡13 meses después de su inauguración! Oiga, eso se hace pero no se dice y menos con tan escaso tiempo de rodaje: ¡Menudo plan de negocio!
Encima, Gimeno retrasa hasta 2025 su umbral de rentabilidad al que poco pueden aportar estos últimos 30 millones de euros, ya comprometidos. La verdad, no parecen buenas noticias, pero lo que es peor: el expresidente de El Corte Inglés (ECI) parece haber entrado en una huída hacia adelante.