Construcciones y Auxiliar de Ferrocarriles (CAF) se recupera del golpe del Covid-19 a gran velocidad gracias a su elevada diversificación (trenes de alta velocidad, regionales y cercanías, tranvías, metro, y autobuses). Y es que ha logrado un beneficio neto de 42 millones de euros hasta junio, frente a las pérdidas de 35 millones de hace un año, unas ventas de 1.411 millones (+26%) y un mayor Ebitda (+63%, a 120 millones).

El fabricante de trenes y autobuses vasco presenta en el primer semestre una situación bien distinta a la de hace un año por el incremento de la actividad, el menor impacto de los tipos de cambio (29,6 millones) y los menores costes financieros, elevando la mejora mostrada entre enero y marzo. Asimismo, las cifras de beneficio, ventas y Ebitda son superiores a la del otro fabricante ferroviario español, Talgo, a pesar de que este también ha pisado el acelerador en los seis primeros meses del año.

CAF ha crecido en contratos, a 2.000 millones (+3,3%), y la cartera de pedidos ha tenido un alza del 7%, hasta 9.400 millones. También destaca el elevado nivel de entregas de autobuses eléctricos de Solaris, que ha pasado de 494 unidades a 743, lo que supone un 56% más. Además, ha reducido la deuda financiera neta en 10 millones, hasta los 301 millones, respecto al cierre de 2020, por la mejora del Ebitda y la contención de las inversiones, y el resultado financiero ha mejorado en 36 millones hasta los -13 millones.